La primera alerta fue de la televisión pagada. En dos años han perdido 520.000 clientes, una caída del 42 %. No son los únicos, pues el teléfono fijo ha dejado de sonar en 410.000 casas, aquí la disminución es del 20 %. La pandemia y la crisis económica hicieron que tres de cada cuatro hogares redujeran o eliminaran uno o varios gastos en los servicios de telecomunicaciones.