El convento de San Francisco, ubicado en el corazón del centro histórico de Quito, es mucho más que un lugar histórico. Además de ser el escenario emblemático de la procesión de Jesús del Gran Poder durante la Semana Santa, el convento alberga una variedad de actividades y servicios que abarcan desde la espiritualidad hasta la ayuda social y la difusión cultural.