Ethan tiene 8 años, sin embargo, una parálisis a causa de un ataque de convulsiones le dejó hace quince días postrado en una silla de ruedas. El lado derecho del cuerpo quedó inmóvil, además, a los 4 años se le detectó un tumor cancerígeno en la cabeza. Pese a esto, él no se perdió la “Pasarela de los sueños”, organizada por la fundación Jóvenes contra el Cáncer.

El tema de este desfile era “De grande yo quiero ser”. Niños de doce provincias se lucieron por la tarima del Salón de la Ciudad del Palacio Municipal, en el centro de Quito. Este fue uno de los eventos realizados en conmemoración del Día Internacional contra el Cáncer Infanto Juvenil.

Cada uno desfiló en traje de gala y con la temática de la profesión que desea cumplir cuando sea adulto. Entre las profesiones hubo quienes quieren ser futbolista, bombero, modelo, policía...

Publicidad

“Cómo mi diagnóstico pasó de sinusitis a leucemia”

Según la fundación, en Ecuador existen 1.190 niños diagnosticados con cáncer. De estos, el 55 % padece leucemia.

Roberth Tapuy, padre de Ethan, comentó que su hijo sueña con ser policía. Desde muy pequeño, en varias ocasiones les dijo que quiere velar por las personas. “A veces vemos las noticias y dice: Papi, mira, le han matado; yo quiero ser policía, quiero salvar a esa gente”, expresó.

Este gusto por las líneas policiales le habría nacido por un familiar de su padre, quien pertenece a esta institución.

Publicidad

Roberth es jornalero y su esposa, ama de casa. Para los dos ha resultado difícil batallar contra el cáncer que padece su segundo y último de los hijos. Procedentes del Tena, provincia de Napo, en la Amazonía de Ecuador, han tenido que viajar para que Ethan se realice los tratamientos médicos y sea valorado por los especialistas.

Allan lucha contra la leucemia en medio de su meta de convertirse en bachiller y continuar su sueño de ser médico

“Muchas veces me ha tocado escoger entre el trabajo y mi hijo, y he escogido a mi hijo, porque quiero pasar aunque sea los últimos momentos o hasta que se recupere 100 %, porque toca mantener la fe”, dijo, mientras se le llenaron de lágrimas los ojos.

Publicidad

Junto con su hijo tienen que acudir al hospital de niños Baca Ortiz para que reciba quimioterapia. Además, hace poco terminaron las radioterapias en Solca.

Ethan no logró comunicarse verbalmente, aunque miraba atento el caminar de sus amigos, esperando su turno para completar la pasarela de los pequeños guerreros que luchan contra el cáncer y que expusieron sus anhelos delante de los invitados.

Entre los niños destacaba una niña con un vestido fucsia, elegante y colorido. Jael Ayoví era quien lo vestía. La menor de 11 años tiene un linfoma desde que tenía 4.

Para ella, el evento era especial, pues su sueño es ser modelo. Ella viajó junto con su madre, quien le apoyaba desde el público. Al inicio sintió nervios y hasta lloró. Pero, una vez que fue anunciada por la presentadora, salió al estrado y desfiló como una modelo profesional.

Publicidad

Alimentos ultraprocesados ​​se relacionan con un mayor riesgo de muerte por cáncer de ovario y cerebro

Actualmente está en sexto grado de educación básica, su materia preferida es Lenguaje y la que no le gusta mucho es Matemáticas.

Sobre su enfermedad comentó que ya terminó los tratamientos y que está a la espera de que su médico le vuelva a dar una cita para ver las nuevas disposiciones.

Mientras tanto, junto con los demás niños recibe ayuda psicológica y emocional por parte de la fundación Jóvenes contra el Cáncer, y por medio de estos eventos aprovechan para olvidar por un momento el dolor y angustia de esta enfermedad. (I)