Durante la madrugada del viernes 25 de abril, Quito soportó una fuerte lluvia acompañada de tormentas eléctricas.
Alrededor de las 05:45 un estruendo despertó a los capitalinos en diversos sectores.
Alicia Bonilla, residente del norte de Quito, aseguró que abrió los ojos porque pensó que algo se cayó.
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“Una luz potente entró por la ventana y luego el ruido fue demasiado fuerte”, señaló.
En la zona se produjo la caída de un poste.
Además, el ECU911, a través del sistema de videovigilancia, reportó un deslizamiento de tierra en el sector de Calderón.
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El hecho dejó sin luz al barrio y la Empresa Eléctrica Quito, junto con el Cuerpo de Bomberos, llegó a la zona para restaurar el servicio de energía, debido a la caída del poste de hormigón.
El deslizamiento afectó parte de la vía, pero no ocasionó pérdidas humanas.
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Otro evento, en menor porcentaje, se evidenció en la calle Ángel Ludeña N59 y Pedro de Alvarado, en el norte de la ciudad.
Un socavón se formó en el adoquinado de la vía, después del sismo de magnitud 6,0 que se produjo en la provincia de Esmeraldas.
En Quito, el sismo no causó estragos, pero varios ciudadanos reportaron que sí se percibió el movimiento telúrico con mayor fuerza en Calderón, Llano Grande, Carcelén y varios sectores del norte de la capital. (I)
