Las noches cuencanas tienen alegría. Varios rincones de la ciudad se vuelven coloridos al caer la tarde. El enorme árbol de Navidad es un atractivo para decenas de personas que llegan cada noche al parque Miraflores para tomarse una selfie y luego subirla a sus redes sociales.
Este año, la Fundación municipal Iluminar decidió concentrar las alegorías navideñas en dos espacios, uno el parque Miraflores, ubicado en el norte de la ciudad, y el parque de la Madre, junto al río Tomebamba, cerca de la zona de El Barranco.
También al caminar junto al río Tomebamba se puede observar los peces bebiendo en el río, como dice el conocido villancico. Este rincón es ya tradicional en esta época del año.
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Las luces navideñas engalanan la avenida Samborondón y otros espacios de La Puntilla
El primer espacio es ideal para caminar como si se tratase de un circuito navideño. En la zona confluyen el árbol, un camino de flores luminosas, el nacimiento gigante, ángeles, conejos y otras estructuras alusivas a la temporada como un bombillo de 10 metros de alto y además letras con mensajes de paz.
En ese mismo sitio, los ciudadanos y turistas encuentran un lugar propicio para tomarse fotos y apreciar las luces que bordeaban estas letras que dicen “Alegría y Tiempo de Paz”.
Mientras tanto, en el parque de la Madre está una capilla lumínica, la simulación de un globo aerostático y una gran bota. Los que deseen caminar un poquito más, pueden ir a Turi, el mirador natural de Cuenca que fue inaugurado el pasado domingo.
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Asimismo, en este lugar turístico se implementó la simulación de un globo aerostático lleno de luces, que atrajo a diversos visitantes de todo el país.
Guayaquil brilla con los colores de la Navidad. Este año se iluminan nuevos espacios
Así, Cuenca se iluminó para recibir la Navidad, en medio de novenas, cantos, solidaridad y paz. (I)