Al menos 1.997 menores sufrieron abusos sexuales por parte de 451 clérigos y dirigentes religiosos en la diócesis de Illinois (EE.UU.), según un nuevo informe publicado este martes por el fiscal general del estado, Kwame Raoul.

Según la investigación de cerca de 700 páginas, los abusos fueron perpetrados por miembros del clero y otros miembros de la diócesis católica de Illinois, que incluye Belleville, Chicago, Joliet, Peoria, Rockford y Springfield.

El informe añade 149 nombres a la lista de abusadores sexuales de menores que las propias diócesis habían identificado públicamente antes o durante la investigación, lo que eleva los identificados a 451 y multiplica así por cuatro la cifra aportada por la iglesia antes de 2018, cuando el Estado comenzó su investigación.

Publicidad

Los nuevos nombres fueron facilitados por víctimas que contaron sus abusos a los investigadores, que también entrevistaron a líderes religiosos y revisaron más de 100.000 páginas de documentos en poder de la diócesis. De los 451 supuestos abusadores mencionados en el informe, 330 han fallecido ya, de acuerdo con Raoul.

Es posible que estos perpetradores nunca rindan cuentas ante un tribunal, pero al nombrarlos aquí, la intención es ofrecer una rendición de cuentas pública y una medida de sanación para los sobrevivientes que han sufrido durante mucho tiempo en silencio”, incidió el fiscal general en un comunicado.

Entre los casos documentados está el del sacerdote Thomas Francis Kelly, que abusó de más de 15 niños de entre 11 años y 17 años en varias parroquias en las décadas de los sesenta y setenta.

Publicidad

Uno de los testimonios, Joe, quien tenía 11 años cuando Kelly abusó de él, explica en el informe que el sacerdote lo invitó a ver una película y a pasar la noche en la rectoría, donde le ofreció cerveza.

Joe se despertó en medio de la noche y se encontró al padre Kelly practicándole sexo oral. Otras víctimas de los abusos de Kelly, quien murió en 1990, también comparten sus vivencias en el informe. El informe también contiene 50 páginas de recomendaciones a las diócesis para que sean transparentes y denuncien los abusos que puedan producirse. (I)