Del llanto a la alegría en cuestión de minutos pasó una familia en Almuñécar, una ciudad de Granada, España, cuando la abuela, a quien daban por muerta, reaccionó mientras se alistaban para llevar su cuerpo a manos de quienes lo recibirían en la funeraria.

La mujer, septuagenaria, estaba literalmente sin signos vitales. No alcanzaban a sentirle el pulso. La mañana del lunes 30 de enero de 2023, sus allegados lo intentaron todo para tratar de reanimarla. La tocaban, miraban su pecho con la esperanza de ver algún movimiento, sinónimo de que respiraba, pero los esfuerzos resultaron en vano.

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Temiendo lo peor, llamaron al servicio de urgencias y el personal médico les señaló que la septuagenaria no respondía a los estímulos. Ni los latidos del corazón los percibían con el estetoscopio.

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Según reseña Clarín, citando a El Español, la decisión, ante semejante noticia, era llamar a la funeraria y que se desplegaran los protocolos exigidos.

Lo primero era establecer la causa de la muerte de la señora. Apunta El Español que al domicilio de la anciana se acercaron personal de la Guardia Civil, la Policía Judicial y el médico forense.

La septuagenaria comenzó a respirar

Las decisiones se tomaban en relación con la entrega del “cadáver” cuando “milagrosamente” la abuela de Almuñécar revivió… Sí, la mujer respiraba a la vista de todos.

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La abuela, para sorpresa y alivio de todos, comenzó a respirar.

De inmediato, dice la prensa española, los médicos le inyectaron adrenalina para que recuperara y empezar a notar sus pulsaciones.

Con este panorama tan distinto, la nueva llamada fue para notificar que se dirigirían al Hospital Santa Ana de Motril, donde la mujer ingresó a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

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Qué pudo haberle pasado a la abuela de Almuñécar

En años anteriores muchos, recogen textos sobre el tema, llegaron a escuchar de los abuelos la palabra catalepsia y de personas que, incluso, a minutos de llevarla al cementerio “despertaban”.

De acuerdo con Psicología y Mente, “este fenómeno de muerte aparente es conocido como catalepsia, categorizada como un trastorno del sistema nervioso central”.

Agregan que “se caracteriza porque la persona sufre una parálisis corporal, junto con un endurecimiento y tensión de los músculos, siendo incapaz de realizar ningún tipo de movimiento”.

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Tras el susto vivido en Almuñécar con esta abuela, sus allegados y el personal que la atiende en la casa de salud espera que se recupere totalmente para darle el alta y pueda volver a casa con los suyos.

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(I)

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