Donald Trump, exmandatario de Estados Unidos y aspirante a la Casa Blanca, sufrió un atentado el sábado, 13 de julio, durante un mitin en Pensilvania, en el que un hombre disparó en su contra, hiriéndolo en la oreja y haciéndolo sangrar visiblemente.

Desde hace días, el Servicio Secreto de Estados Unidos, que escolta al candidato a sus eventos de campaña, había identificado el tejado desde el que intentaron matar al republicano como un potencial riesgo de seguridad.

“Se supone que no debería estar aquí, se supone que debería estar muerto”, dice Donald Trump en su primera entrevista después del atentado en Pensilvania

Los agentes que prepararon el dispositivo de seguridad días antes del mitin eran conscientes del riesgo que podía ser ese edificio, según admitieron a NBC dos fuentes cercanas al Servicio Secreto.

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El tejado estaba ubicado a unos 135 metros de donde Trump iba a hablar en el mitin, pero fuera del perímetro de seguridad del evento.

El Servicio Secreto ha dicho que la seguridad de ese edificio era responsabilidad de las autoridades locales, aunque el fiscal del condado ha desmentido esa versión.

Joe Biden hace un llamado a la unidad nacional tras atentado contra Donald Trump

El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, admitió este lunes, 15 de julio, que el suceso fue un “fallo” de seguridad.

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En un mensaje en la red social X, el senador republicano Ted Cruz reclamó por la dimisión de la directora del Servicio Secreto, Kimberly Cheatle.

Por su parte, el congresista republicano James Comer, presidente del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, anunció que citará a Cheatle a declarar al Legislativo la semana que viene, una vez que finalice la Convención Nacional Republicana.

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Cheatle anunció hoy en un comunicado que el sábado, después del intento de asesinato, ordenó cambios en el esquema de seguridad de Trump.

Bombero de 50 años murió en atentado contra Donald Trump durante mitin

Trump fue herido de bala en una oreja durante un mitin el sábado antes de que francotiradores del Servicio Secreto abatieran al tirador, un joven de 20 años cuyos motivos aún se desconocen.

El joven disparó desde un tejado muy cercano al mitin, momentos después varias personas alertaron a los servicios de seguridad de su presencia sospechosa. (I)