Al menos 1.037 personas murieron por el sismo que sacudió el viernes por la noche Marruecos, según un nuevo balance del Ministerio del Interior divulgado este sábado.

El fuerte temblor, de magnitud 6,8 según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), dejó también 1.204 heridos, “de los cuales 721 están en estado crítico”, indicó el ministerio en un comunicado. El anterior balance era de 820 muertos y 672 heridos.

El movimiento telúrico provocó el derrumbe de varios edificios en esas dos provincias, en el suroeste del país.

Publicidad

La sacudida se sintió hasta la capital Rabat, a cientos de kilómetros, y en ciudades costeras como Casablanca o Esauira, incluso en el país vecino de Argelia, donde las autoridades descartaron daños o víctimas.

El USGS informó que el movimiento telúrico tuvo produjo a una profundidad de 18,5 kilómetros, con epicentro 71 kilómetros al suroeste de Marrakech a las 23:11 hora local (22:11 GMT).

Sentimos una sacudida muy violenta, me di cuenta de que era un temblor”, contó Abdelhak el Amrani, un habitante de Marrakech de 33 años, en una entrevista por teléfono a AFP.

Publicidad

“Vi que los edificios se movían. No tenemos los reflejos para este tipo de situación. Después salí y había mucha gente fuera. La gente estaba conmocionada y en pánico. Los niños lloraban, los padres estaban desamparados”, relató Amrani.

Una máquina excavadora ayuda en las tareas de búsqueda de supervivientes entre los escombros de edificios derruidos en la población de Amizmiz, situada a unos 30 kilómetros del epicentro del terremoto, en las faldas del Atlas. Foto: EFE

Los medios marroquíes informaron que este es el sismo más potente registrado en este reino en el norte de África.

Publicidad

El Ministerio de Interior afirmó que las autoridades movilizaron “todos los recursos necesarios para intervenir y ayudar en las zonas afectadas”.

Los hospitales en Marrakech registraron una “afluencia masiva” de heridos y el centro local de transfusión de sangre emitió un llamado a la población para hacer donaciones.

“Entramos en pánico”

Videos grabados en Marrakech muestran a los habitantes saliendo despavoridos de los edificios en medio de la sacudida, escombros que se desprenden de los inmuebles hacia estrechos callejones y vehículos cubiertos de piedras.

En uno de ellos se observa un minarete de una mezquita que colapsó en la famosa plaza Yamaa el Fna, el corazón de Marrakech, y que causó heridas a dos personas.

Publicidad

Un corresponsal de la AFP vio a cientos de personas concentradas en esta emblemática plaza para pasar allí la noche por el miedo a las réplicas. Algunos con mantas y otros durmieron directamente en el suelo.

Nos paseábamos por Yamaa el Fna cuando la tierra empezó a temblar, era verdaderamente asombroso como sensación”, explicó a AFP en la plaza Houda Outassad.

“Estamos sanos y salvos, pero todavía conmocionados”, añadió esta habitante de la ciudad, que perdió a diez familiares en Ijoukak, pueblo rural en Al Hauz.

Mimi Theobald, una turista inglesa de 25 años, estaba con unas amigas a punto de comer el postre en la terraza de un restaurante “cuando las mesas empezaron a temblar, los platos a volar. Entramos en pánico”.

El papa Francisco expresó “su profunda solidaridad por las víctimas”, en un mensaje enviado por el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin.

El presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, expresó sus condolencias al país vecino por la “tragedia”.

Varios países, entre ellos España, Reino Unido, Italia o Israel, ofrecieron apoyo a Marruecos para las labores de rescate.

La gente camina entre los escombros de un edificio dañado tras un terremoto en Marrakech, Marruecos, 09 de septiembre de 2023. Foto: EFE

Francia, que tiene una numerosa población de origen marroquí, manifestó su “solidaridad” y su presidente, Emmanuel Macron, se dijo “conmocionado”.

Los presidentes de Rusia, Vladimir Putin; de Ucrania, Volodomir Zelenski; de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y de China, Xi Jinping también expresaron sus condolencias y solidaridad. La Unión Africana manifestó su “gran dolor” por la tragedia.

Desde la cumbre del G20 en Nueva Delhi, el primer ministro indio, Narendra Modi se dijo “extremadamente apenado por las pérdidas de vidas”.

El reino alauí experimenta terremotos con frecuencia en su región septentrional debido a que está entre las placas africana y euroasiática.

En 2004, al menos 628 personas murieron y 926 resultaron heridas cuando un terremoto golpeó Alhucemas, al noreste del país. (I)