En menos de una semana, el escenario político en la Asamblea Nacional cambió radicalmente. Tras los hechos registrados en la Embajada de México en Quito, que implicaron la detención del exvicepresidente Jorge Glas, el acuerdo legislativo que mantenía el Gobierno con la bancada de la Revolución Ciudadana se evaporó y aún se espera el pronunciamiento del Partido Social Cristiano, con quienes armó su mayoría legislativa, que superaba los 92 votos.

Durante el receso legislativo, que concluye este 9 de abril, la correlación de fuerzas en la Asamblea Nacional se transformó y, con ello, el Gobierno perdió los 51 votos del correísmo, uno de los principales aliados que lo ayudaron a aprobar cinco proyectos económicos urgentes.

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Hoy, antes de que concluya el receso legislativo, el correísmo anunció una oposición radical al régimen de Daniel Noboa, a quien no perdonarán que se haya atrevido a disponer la detención de uno de sus principales líderes, Jorge Glas Espinel, irrumpiendo en la sede diplomática de México en Quito para luego trasladarlo a la cárcel de máxima seguridad en Guayaquil.

El Gobierno de Daniel Noboa, al instalarse el presente periodo legislativo, en noviembre de 2023, provocó en la Asamblea Nacional un acuerdo político con el correísmo y socialcristianismo que permitió colocar a Henry Kronfle en la presidencia del Parlamento, a Viviana Veloz (RC) en la primera vicepresidencia y a Ecknner Recalde (ADN) en la segunda vicepresidencia, y además se concretó una distribución de las quince comisiones especializadas permanentes. Ese tablero político ahora cambió radicalmente, mientras el Gobierno pugna por ganar el referéndum y la consulta popular 2024, previstos para dentro de menos de quince días, en que también aspira a medir su popularidad frente al electorado.

La capacidad de maniobra que tendrá el Gobierno será escasa, porque la primera lectura que tiene el Partido Social Cristiano (PSC) frente a los hechos registrados en la Embajada de México en Quito lo obliga a prender sus alarmas, porque podría ser la próxima organización política en ser golpeada por el Ejecutivo, pues uno de los personajes representativos de ese partido y que mantuvo cercanías con la cúpula de la lista 6 está procesado en el caso Purga, y aún no se conoce su desenlace.

El presidente de la Asamblea, Henry Kronfle, de origen socialcristiano, intentará sostener la mayoría legislativa que lo llevó a la presidencia, pero el acuerdo está roto. Con lo sucedido durante el receso legislativo y el anuncio de RC, al titular del Legislativo le queda muy poco para recomponer el acuerdo.

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El correísmo anunció una oposición total al presidente Daniel Noboa, y la decisión es no dar paso a ninguna de sus iniciativas legislativas y activar un proceso de fiscalización de todas sus carteras de Estado, empezando por lo sucedido en la Embajada de México en Quito.

Lo que queda al Gobierno es el grupo de asambleístas de su bancada Acción Democrática Nacional (ADN), los independientes y abrir acuerdos con el movimiento Construye, que puede convertirse en la bisagra política para el régimen en el momento de reunir votos para aprobar leyes.

El Gobierno tendrá que hacer esfuerzos para atraer los votos de Construye y masticar piedras, luego de que el propio presidente Daniel Noboa, en enero de 2024, fustigó a la principal dirigente de esa organización política, María Paula Romo, a quien describió como “pókemon”, y además tildó a ese movimiento como “Destruye”.

Lo que valora el bloque de gobierno es que, en un mensaje en la red social X (antes twitter), la asambleísta Ana Galarza, que se pertenece al movimiento Construye, haya reconocido “la valentía del Gobierno del presidente Daniel Noboa con la detención de Jorge Glas”. “Y me disculpo porque hasta antes de la detención había fuentes de información que daban señales de que todo podría ser una cortina de humo para que Glas pudiera escapar, y lo advertimos y alertamos. Ventajosamente no fue así. Y se le reconoce al Gobierno su accionar”, expresó.

Ese texto posteado por Galarza, para el sector oficialista, es una señal de que podría ser el próximo aliado del Ejecutivo en la Asamblea Nacional.

El movimiento Pachakutik tiene definida la línea política y esta vez estará más cerca de la posición política de la Revolución Ciudadana, con quien coincide en censurar lo ocurrido en la Embajada de México en Quito, y además la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) ha condenado la actitud del presidente de la República en un evento en Imbabura, que según esa organización pretende dividir al movimiento indígena e inclusive habla de abuso de su simbología.

Lo que se viene en materia de fiscalización es complicado para el régimen de Noboa, porque se anuncian juicios políticos para al menos a tres ministros de Estado: Gobierno, Defensa y Relaciones Exteriores, por los hechos registrados en la Embajada de México en Quito.

Desde el lado de la bancada oficialista buscará estrategias para dilatar los procesos de juicios políticos contra los ministros de Estado, e inclusive empezó a recoger firmas para presentar solicitudes de interpelación en contra de exministros del Gobierno de Guillermo Lasso. Con ello, ganará tiempo para continuar su gobierno.

La primera prueba sobre la nueva recomposición de fuerzas será la votación pendiente del proyecto de reformas al Código Orgánico Integral Penal (COIP), y la capacidad de maniobra del régimen se medirá en el momento de conformar la terna de la Asamblea Nacional para designar al vocal del Consejo de la Judicatura. (I)