Babahoyo, LOS RÍOS
El cadáver Adriana Abigail Robelly Izquierdo, de 30 años, presentaba cuatro balazos en la cabeza.
Poco antes del hallazgo de su cuerpo, sus asesinos lograron escapar en el mismo carro en el que la habían secuestrado.
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Adriana Robelly era comerciante, se dedicaba a la venta de granizados en la parroquia El Salto del cantón Babahoyo. La tarde del lunes laboraba como de costumbre cuando, a bordo de un carro sin placas, llegaron cuatro hombres. Tres de ellos le pidieron granizados, mientras que el cuarto sujeto permaneció al interior del vehículo.
Creyendo que se trataban de clientes, Adriana les despachó los pedidos, pero cuando se los iba a entregar estos la agarraron a la fuerza y la embarcaron en el carro.
Los gritos de la mujer alertaron a los otros comerciantes de la zona y a familiares quienes reportaron el secuestro a la Policía a través del ECU 911.
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Los testigos dijeron a los agentes, según el reporte policial, que uno de los sujetos que secuestró a la comerciante sería su exconviviente a quien conocían como alias “Cangrejo”.
Tras la alerta los agentes patrullaron varios sectores de Babahoyo en busca del vehículo hasta que este fue localizado en el sector Paraíso Norte, donde anteriormente funcionaba una piladora.
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Mientras los policías trataban de llegar al sitio vecinos del sector fueron testigos de la fuga de los victimarios. Los lugareños indicaron que escucharon varios disparos que provenían de una casa de caña abandonada y de donde vieron salir corriendo y con armas en las manos a dos hombres.
Los criminales abordaron un carro de color oscuro.
Al interior de la casa de caña estaba el cadáver de Adriana Robelly Izquierdo. La mujer fue asesinada con cuatro disparos en la cabeza, según la Policía.
Comerciante que estaba desaparecida fue hallada muerta en Babahoyo
Los familiares de la víctima indicaron que Adriana tenía tres meses de haberse separado de su exconviviente, debido a las constantes agresiones que este le ocasionaba.
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El sujeto la habría amenazado por negarse a retomar la relación sentimental.
Joffre Estrada, coronel de la Policía, dijo que el lugar donde se cometió el presunto femicidio fue destruido porque era utilizado para cometer varios actos delictivos como secuestros. (I)
