Al menos 18 horas estuvo secuestrado Roberto R., un hombre que conducía un taxi amarillo por el suburbio de Guayaquil la noche del lunes 2 de septiembre.
Él ya llegaba a su casa cuando fue parado por adolescentes para una carrera y lo raptaron antes de su destino.
Los sospechosos le dieron un cachazo en la frente y lo pasaron al asiento trasero bajo amenazas.
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Roberto fue llevado hasta una casa del Batallón del Suburbio, en las calles 44 y la Q, donde al mediodía de este martes los agentes de la Unidad Antisecuestro y Extorsión (Unase) lo rescataron.
Junto con Roberto estaba Freddy L., otro taxista que fue secuestrado la misma noche y que llegó al lugar de cautiverio solo una hora después.
Taxista fue rescatado por la Unase en una casa del suburbio, donde hallaron a más víctimas
Ambos permanecieron maniatados en un piso de tierra.
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La Unase capturó en el sitio a dos adolescentes cuando alimentaban a las víctimas.
Otros menores de edad fueron capturados en una vivienda de la 43 y la K, donde además se halló el carro de Freddy L. en un garaje.
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El vehículo de Roberto aún no aparece.
Hasta la tarde de este martes, 3 de septiembre, los operativos continuaban en la zona para detectar a las personas involucradas en esta red de secuestro extorsivo.
El mayor Juan Carlos Pacheco, jefe subrogante del distrito Portete, indicó que hasta las 15:30 se había capturado a seis menores de edad y un adulto.
Detalló que entre los aislados estaban las dos adolescentes que paraban a las víctimas; una de ellas usaba ya el celular de uno de los rescatados.
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El hombre que fue sorprendido por los familiares de Roberto R. conduciendo su taxi amarillo aún no es detenido.
Este sujeto fue localizado cuando comía encebollado en la 29 y Portete.
La pareja de Roberto contó que lo vieron sacarse las llaves del bolsillo y subirse al taxi como si fuera el dueño.
Aunque protagonizaron una persecución por las calles de la zona, el hombre logró escapar y aún no es localizado.
Los familiares de Roberto R. llegaron a la Unidad de Vigilancia Comunitaria (UVC) de la 29 y la J para reencontrarse con él.
La esposa lloró aliviada al verlo entrar y agradeció a la Policía por el rescate que se dio en pocas horas.
Además, los allegados de Roberto contaron que a las 10:00 le hicieron un retiro de su cuenta en un cajero ubicado en la calle 11, también en el suburbio.
El mayor Pacheco indicó que las unidades actuaron rápido y que la banda no alcanzó a contactarse con las familias para pedir un rescate.
Además, recomendó a los conductores tener cuidado y compartir sus ubicaciones con sus allegados para poder monitorearlos y reportar de forma oportuna cualquier novedad.
Los familiares de los adolescentes detenidos llegaron también hasta la UVC para reclamar a los agentes que ejecutaron el operativo de rescate y los aislaron.
Aseguraron que sus hijos eran inocentes y lanzaron amenazas contra los policías y la prensa que cubría el rescate.
En las próximas horas se hará la audiencia de flagrancia por el secuestro de los conductores contra los implicados. Entre los indicios hay un arma de fuego y varios celulares, además del carro de uno de los taxistas. (I)
