En la Ley de Extinción de Universidades se han añadido dos artículos con disposiciones especiales para las sedes de universidades internacionales, según las cuales dejarían de percibir las asignaciones que para investigación y administración recibían del Estado ecuatoriano, y la administración de las becas financiadas por el Estado pasarían a otro organismo, no académico.
Las dos universidades de posgrado en Ciencias Sociales que existen en el país, la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) y la Universidad Andina Simón Bolívar (UASB) serían directamente perjudicadas, poniéndolas al borde de la extinción, pues la investigación es el eje central de la actividad académica de los posgrados.
Es de gran importancia para la educación universitaria del país que se garantice la seguridad del financiamiento de las instituciones mencionadas, respetando su autonomía administrativa y académica para que puedan seguir aprovechando la experiencia ganada en la investigación y formación de profesionales en las Ciencias Sociales, con título de cuarto nivel. Lo contrario sería contradictorio con las declaraciones de que necesitamos excelencia académica y la exigencia de estudios de posgrado a los docentes universitarios. (O)
