El anuncio de la reapertura de escuelas rurales trae esperanza a los habitantes de poblados pobres que, con la promesa de creación de las publicitadas escuelas del milenio, vieron cómo quedaron en el abandono los centros unidocentes y tuvieron que enviar a sus hijos a escuelas lejanas.

El ministro de Educación, Milton Luna, el pasado jueves, explicó que el gobierno de Rafael Correa se cerraron 7.000 planteles educativos. De esos se espera reabrir unos 1.000 durante este año y otros 1.000 en el 2020, realizando previamente una investigación para conocer la realidad de la zona.

También se anunció la reducción de la carga administrativa de los docentes y se habló de desarrollar la educación técnica, para lo cual se está preparando un proyecto que involucra a los sectores productivos y otros ministerios, como el de Agricultura, en el que se planea aprovechar la infraestructura de las 101 Unidades Educativas del Milenio que se construyeron a partir del 2008 y otras 35 que aún están en construcción.

Poner énfasis en a educación rural es sin duda una acertada decisión, que trabajada de manera eficiente solo podrá dar buen fruto.