A pesar del empate conseguido de visitante ante el equipo Macará de la ciudad de Ambato, el pasado 29 de marzo, su fanaticada no está contenta y poco a poco el equipo está matando la ilusión de verlo campeón. El fútbol siempre debe ser para adelante, con toques de primera instancia, rotación del balón y pases filtrados al vacío para que sus compañeros a base de velocidad puedan disparar al arco contrario de manera contundente. Creo que el ideal para el puesto de director técnico debió haber sido el profesor César Farías, conocedor del medio y que sabe llegar más al jugador. (O)

Juan Pablo Sanz Giler, Guayaquil