El crimen de la abogada María Belén Bernal, en Quito, desaparecida 11 días, encontrado el cuerpo el jueves 22 por la policía, enterrado en un cerro; no es solo un caso más de un delito espantoso, violencia, inseguridad, femicidio, sino también como los expertos opinan por los órganos de difusión y el internet, un caso de neglicencia en la aplicación de leyes, de la administración de la justicia, que comprometería al Estado. El crimen y los antecedentes y escándalos, se desarrollaron en una escuela superior de la policía; ¿nadie estaba enterado en el interior de rumores, desorden, comportamientos?

En entidades, en casos de corrupción y escándalo muchos ojos ven, oídos escuchan; pero autoridades echan de cargos a funcionarios de menos rango o de cierto grado superior; les hacen favor enviándolos a casa. Deben sancionar duro, agilizar investigaciones, sin demoras y excusas, castigar a todo culpable, caiga quien caiga, regenerar las instituciones. (O)

Federico Molina Y., Guayaquil