El 3 de abril se llevarán a cabo las regatas más famosas del Ecuador realizadas en mi ciudad de Vinces desde 1957 y reconocidas a nivel internacional, pero debido a la pandemia estuvieron postergadas dos años.

El anuncio del COE (Comité de Operaciones de Emergencia) del fin de la semaforización y permitir el ciento por ciento de los aforos, las autoridades del cantón realizarán dicho deporte acuático donde intervendrán fuerabordistas del país y del exterior.

La ciudad se prepara para recibir turistas en un día de festejo donde no solo van a ver la competencia de los botes y a los fuerabordistas sino podrán deleitarse de la gastronomía que es muy variada y apetecida por los visitantes (seco de gallina y de pato, caldo de gallina, humitas, bollos de carne, tamales, hornado, ayampacos, tapao, chocolate, jugos).

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Vinces posee malecón, playas de agua dulce, un monumento arquitectónico del año 1878 donde funcionaba el Municipio, es uno de los edificios más antiguos; una icónica iglesia que todavía tiene el repicar de las campanas; sus calles donde todavía existen casas de antaño, orgullo de la ciudad. París chiquito, es el apelativo del cantón. Vinces posee los humedales más extensos de Ecuador, Abras de Mantequilla.

Pido a las autoridades competentes arreglar la carretera Macul–Vinces que recibe mucho tránsito de vehículos.

La ciudad debe tomar conciencia durante el festejo, precaución, convirtiéndose los habitantes en los guardianes de la seguridad y de la salud de Vinces y de los turistas.

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La pandemia de coronavirus no ha terminado, por lo tanto el control y las acciones, en lo posible, no tienen que olvidarse: medidas de seguridad, uso de mascarillas y de gel, lavarse las manos, cumplir las distancias, etc.

Tenemos que ser verdaderos amantes de la salud, la paz y de los protocolos porque existe COVID–19. (O)

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Alicia Carriel Salazar, Guayaquil