Para agilizar la atención y evitar gastos de papel en fotocopias y contaminación ambiental, las dependencias públicas desde el lunes 6 de septiembre no pedirán a los usuarios, copias de la cédula de identidad y del certificado de votación. Carlos Granja Medranda / EL UNIVERSO Foto: Carlos Granja Medranda


El no exigir las copias de la cédula de ciudadanía y del certificado de votación en las instituciones estatales para despachar gestiones, diligencias, tramitación, se espera se cumpla con honestidad. (I)


Publicidad


Briana Delgadillo

Ojalá no solo sea esto de no pedir las copias en blanco y negro y a color, de tal medida y nitidez de la cédula de ciudadanía y del certificado de votación, sino que simplifiquen el ‘tortuguismo’, la burocracia en las instituciones públicas, que obligan a los usuarios a volver muchas veces en una semana, dos meses, para aceptar un trámite que pueden atenderlo en el momento. Son artimañas de ciertos burócratas que no mueven un dedo sino les pasan, no para las colitas y galletitas, sino para la jabas de colas y la pailota de comida; si no les pasan buena mano para comprarse la cocina o la refrigeradora. Las coimas, los pases de mano con ‘manteca’, dinero, tienen que morir en la función pública; ciertas personas que realizan eso, no sirven sino que se sirven de la función pública, abusan del público. La idea equivocada de que el funcionario o empleado público hace un favor al ciudadano y tiene que recibir algo a cambio debe terminar a partir de este Gobierno. Tiene que existir un departamento en todos los organismos públicos donde acudir a denunciar en el momento que el usuario es abusado en esa institución; protegiendo al usuario que denuncia para que ese empleado no tome represalias obstaculizándole el trámite, perdiéndole los documentos, etc. (O)

Publicidad



Publicidad

José Ernesto Ortoneda

Me parece que no habrá ninguna garantía en los trámites que se efectúen y se tendrá que confiar en la honestidad y buena fe de los servidores públicos.

Es verdad que pueden facilitar los trámites y no perder tiempo en ventanillas, mas, si se tiene capacidad suficiente o idónea para desempeñar cargos públicos, no creo que pueda ser un obstáculo ni para el usuario ni para el servidor público la presentación de dichos documentos. Los documentos son los que dan validez y respaldan todo trámite, porque “ojos vemos, corazones, no sabemos”. (O)


Publicidad


Orlando Roca

Deseamos que el trabajo sea honesto, no entre la corrupción a usurpar identidades, decir me llamo así, pero ese no es su nombre sino que se toma el nombre del vecino. Este sistema funciona bien en países que tienen gobiernos, funcionarios, y candidatos a autoridades honestos, educados desde las escuelas para servir a sus patrias, porque el correcto desempeño de los servicios públicos redunda en el desarrollo de sus sociedades. (O)