Los primeros pobladores de la comunidad de Taro, que registra más de 100 años de existencia en el cantón Nabón de Azuay, usaron el sombrero de tallo de trigo y cebada. Lo hacían porque en la época sin lluvias el sol caía perpenticularmente y el oficio de agricultores obligaba a protegerse, asegura Piedad Ortega, artesana de este artículo.