El deporte de Ecuador vive hoy un clima de conmoción ante el peligro de una pandemia política que promete convertir en cenizas los escombros que han quedado después de doce años de vigencia de la actual Ley del Deporte, forjada en las cocinas de la ‘Familia Revolución Ciudadana (FaRC)’ con asesoría venezolana. Para que podamos recordar los pormenores del desastre, bajo la ideología del Pensamiento Único que asoló el país, desde Carondelet se urdió la patraña de apoderarse de los entes deportivos para someterlos y manipularlos a los intereses del grupo que depredó la institucionalidad republicana, con la represión y el abuso contra las libertades ciudadanas.