No cabe duda del dominio que los equipos brasileños y argentinos ejercen en los últimos años en la Copa Libertadores de América. En las últimas tres ediciones todos los semifinalistas han sido de los dos países que mandan en Sudamérica y hace cuatro años Barcelona SC fue el único que se coló en esa ronda para luego caer ante Gremio de Porto Alegre. Ahora el cuadro torero quiere acabar con la tiranía de Brasil y Argentina para de nuevo estar entre los cuatro mejores del continente.