“Es una máquina perfecta y maquiavélica”, dijo de Emiliano Dibu Martínez, arquero de Argentina, Geir Jordet, profesor en la Escuela Norwegian de Ciencias del Deporte de Noruega, luego de la exhibición del golero en la tanda de penales contra Países Bajos, en los cuartos de final de la Copa del Mundo de Qatar 2022. En esa instancia el portero atajó dos cobros decisivos para la clasificación de la Albiceleste.

“Argentina es campeona del mundo tras una clase magistral en la tanda de penales. En el centro de su actuación están los juegos mentales del arquero Emiliano Martínez”, publicó el especialista en su cuenta de Twitter @GeirJordet.

Emiliano ‘Dibu’ Martínez, ‘máquina perfecta y maquiavélica’ que usa ‘tácticas abusivas’ contra cobradores de penales

Según el experto en Psicología del deporte, Actuación y asfixia bajo presión, y Desarrollo de la pericia “los penales son un juego psicológico y los porteros son parte de ello. El comportamiento de Martínez está en el límite, (las suyas) son acciones extremas… Tácticas abusivas y manipuladoras. Es maquiavélico”. Desde esa exhibición frente a Países Bajos, el guardameta es objeto de estudio de Jordet, quien analizó lo que Dibu hizo en la final contra Francia, a la hora del cobro de penas máximas para decidir al campeón.

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Jordet mencionó los “trucos” y “juegos mentales” que empleó Martínez para dominar la tanda y forzar dos fallos de los cobradores de Francia, dicen varios medios de comunicación del planeta. Estas son las seis artimañas psicológicas que habría usado el golero de 30 años.

La explicación del ‘Dibu’ Martínez a su obsceno gesto en el festejo de Qatar 2022

1. ‘Preparar el escenario’

El primer paso del plan del Dibu, según el psicólogo y catedrático noruego, estuvo dirigido contra su colega Hugo Lloris. La Nación, de Buenos Aires, y El Tiempo, de Bogotá retoman la explicación de Jordet.”Martínez preparó el escenario y se adueñó del área penal desde el principio”. Mientras Lloris estaba ocupado en el sorteo, como capitán de su selección, junto a Lionel Messi y el árbitro Szymon Marciniak, “Martínez caminó rápidamente hacia el área penal, esperando a que llegara Lloris, como si le estuviera dando la bienvenida a un visitante a su propia casa: ‘¡Estás en mi casa ahora!’, dijo el experto”, que fue la postura del gaucho ante el francés.

‘Es un arrogante, como España quedó fuera también quería lo mismo para nosotros’, la descarga de Emiliano Martínez, arquero de Argentina contra el árbitro

2. ‘Ambigüedad abusiva’

La segunda parte del plan fue mostrarse cortés. “Jordet destacó además cómo Dibu saludó con un apretón de manos a Lloris y también al primer lanzador de los galos, Kylian Mbappé. “Martínez puede ser cálido y encantador al principio, lo que hace que las personas bajen la guardia, dejándolas más vulnerables cuando ataca más tarde. Esta ambigüedad es en sí misma abusiva y parte de su estrategia”, afirma el psicólogo en sus redes sociales.

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3. ‘Trabajó’ al árbitro

“Sus juegos mentales son impredecibles y calculados. Es el Maquiavelo del fútbol”, asevera Jordet, quien detalla que ni el juez se le escapó al golero de Argentina en su estrategia para tratar de llevar al título a su país en la tanda de penales. Da más detalles Jordet, quien publica en las principales revistas de psicología y ciencia del deporte, y su investigación aparece regularmente en medios de comunicación como The New York Times, Wall Street Journal, London Times, The Guardian, BBC y Der Spiegel.

“Uno de los trucos sencillos, pero poderosos, es instar al árbitro a que revise la correcta posición de la pelota antes de que el rival dispare. El arquero de Argentina habría probado esto en el turno de Mbappé y Kingsley Coman, algo que la autoridad aceptó y que completó la maniobra de distracción”, se lee en La Nación, con base en los dichos de Jordet: “Probablemente para conocer al árbitro y sentir dónde se dibuja la línea Martínez presionó un poco más. El juez nuevamente verificó la ubicación de la pelota. Ahí Martínez supo que dominaba el área penal y que podía ponerse a trabajar por completo”.

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4. Festejar para bajar la moral

Si bien el tiro de Mbappé entró a las redes, en el turno de Coman (tras acertar Messi su tiro) el ardid de hacer bajar la guardia dio frutos: Martínez detuvo el lanzamiento a la izquierda. Explica el catedrático: “Los arqueros rara vez celebran a lo grande después de las paradas de penal. Martínez es una excepción”. Ese festejo efusivo no fue gratuito, aclara Jordet: “Las celebraciones grandes e intensas indican confianza, dominio y superioridad, lo que afecta positivamente a los compañeros de equipo y negativamente a los oponentes”.

5. Más distracciones

Con Argentina 2-1 arriba en la tanda Aurélien Tchouaméni se dispuso a patear, después de que falló Coman. Esta es la visión de Jordet de ese instante: “Ahí el Dibu se apropió del balón, mientras instaba a la afición argentina a hacer ruido en el estadio. El árbitro y el centrocampista francés esperaron a que (el arquero) terminara su acto, pero cuando eso sucedió vieron que había pateado la pelota por un lado, lo que agregó otro elemento de desconcentración. Sin sanciones del árbitro. Esto les dice a todos quién manda”. El lanzamiento de Tchouaméni salió desviado.

6. Cuidó a sus cobradores

Además de desestabilizar la concentración de los rivales, Martínez también tuvo la visión de impedir que su contraparte, Hugo Lloris, hiciera algo similar con los jugadores argentinos. “De manera que cuando le tocaba dejar el arco, tomaba la pelota y se las entregaba en manos a sus compañeros o la dejaba en el punto penal. Proactivo y eficaz”, calificó el experto noruego. (D)