River Plate de Argentina derrotó como local al brasileño Inter de Porto Alegre por 2-1, en partido de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores jugado este martes en el estadio Monumental, en Buenos Aires, ante más de 85.000 espectadores.

Enner Valencia (45+1 minutos) puso al frente al equipo brasileño, pero River lo dio vuelta en el segundo tiempo con un doblete de Pablo Solari (65 y 78 minutos), que entró como suplente.

Como sucede de manera habitual, River inclinó desde el primer minuto la cancha sobre el campo de Inter, al que le costaba hacer pie ante un adversario que lo ahogaba desde la salida, y que pronto tuvo su primera oportunidad en un cabezazo apenas alto de Nacho Fernández.

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Con un juego dinámico y preciso, con paciencia para trabajar cada jugada, River dominó con holgura ese tramo y volvió a estar cerca de abrir el marcador con un pase filtrado para Beltrán, que remató con potencia, pero encontró bien parado al arquero uruguayo Rochet, y luego fue De la Cruz el que probó desde lejos y el balón salió apenas afuera.

Empezó a mejorar Inter a medida que pasaban los minutos, y llegó por primera vez cerca de los 25 minutos, con una chilena de Enner Valencia que salió al lado del palo, mientras que el local volvió a acercarse en una llegada del movedizo De la Cruz, pero Mercado llegó con lo justo para barrer y salvar el arco brasileño.

El primer tiempo parecía culminar en cero, pero González Pirez cometió una falta sobre el costado, Alan Patrick envió el centro cerrado, y Enner Valencia apareció por el medio para cabecear en lo alto y vencer la resistencia de Armani, para quebrar una larga sequía y anotar su primer gol con la camiseta del Colorado.

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Muchas veces contundente en el área de enfrente, River pagaba muy cara la poca efectividad en un primer tiempo muy favorable en el juego, mientras que la visita se llevaba un rédito enorme con una de sus pocas incursiones en el área de la banda roja.

Pero el local recuperó la compostura y volvió a asediar el campo de Inter, que buscó refugio en las manos del charrúa Rochet, que debió intervenir con mucha solvencia para sacarle un remate potente a Barco dentro del área, un zurdazo de primera a De la Cruz, y otro derechazo esquinado de Barco que salvó con una estirada formidable.

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Ante la necesidad, Martín Demichelis movió el banco de suplentes y encontró la llave para alcanzar la paridad en Pablo Solari, que ingresó a los 63 y dos minutos después encontró espacio por la izquierda ante un pase al vacío de De la Cruz, y definió con un derechazo bien pegado al segundo palo de Rochet.

Volvió a intervenir el portero uruguayo en un par de oportunidades, pero el dominio local se hacía insostenible para un Inter al que el empate ya le quedaba demasiado grande, y el desequilibrio para los de la banda roja llegó en otro pase al claro de Beltrán para Solari, que escapó solo y definió ante un portero desprotegido, mal parada la zaga interista.

Aunque pudo haber ganado por un margen más amplio y terminó con 21 remates al arco rival, River se llevó un buen triunfo después de haber estado abajo en la cuenta, celebró su 15.º triunfo seguido en el Monumental, y aunque la ventaja no es muy amplia, buscará defenderla en Brasil, donde Inter deberá mejorar mucho para torcer el curso de la serie. (D)


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