Insólito, por partida doble. Tras la salvaje entrada con que Igor Vinícius fracturó a Joao Rojas -pierna del jugador de Barcelona SC parecía de plastilina, se movía como soga cuando fue golpeada por el lateral del Sao Paulo-, el árbitro peruano Kevin Ortega no revisó en el VAR las imágenes de la violenta acción que tal vez terminó con la temporada del ecuatoriano, quien este viernes 17 de mayo fue operado.