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Michael Arroyo se vinculó por segunda vez con Barcelona en el 2018. Estuvo hasta 2020.

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Lo único que tengo con Barcelona es mi demanda”. Así resumió Michael Arroyo su relación actual con el club canario, cuyo presidente, Carlos Alfaro Moreno, “no quiso arreglar” por una deuda que el jugador de 34 años exige y que ha llevado a instancias de FIFA.

“Yo hablé con Alfaro. Él no quiso arreglar y yo tuve que tomar otra decisión. Soy barcelonista, pero ya son dos, tres años (en espera del pago), y tuve que poner la demanda”, dijo el futbolista guayaquileño, sin equipo actualmente, en diálogo este martes con radio Área Deportiva.

En enero de 2020, Aquiles Álvarez, vicepresidente deportivo de Barcelona, dijo que Arroyo debía “desistir de su demanda” para poder jugar esa campaña con los canarios, que lo ficharon en 2018. El futbolista fue parte del equipo campeón de Ecuador el año pasado, marcando un gol y disputando nueve partidos, el último el 23 de noviembre.

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El atacante, que cumplió una suspensión de seis meses por dopaje desde noviembre de 2018, exigía mediante su representante legal el pago de $ 8′396.500, algo más de la mitad en concepto de “daños y perjuicios”, según detalló a inicios de 2020 el abogado Santiago Zambrano Solano.

Este martes, Arroyo añadió en declaraciones que recoge el sitio web Fútbol Ecuador: “Soy jugador libre. El pase es mío. Tengo una demanda con Barcelona, ya que no cumplieron mi contrato. Lo único que tengo con Barcelona es mi demanda, que se fue a FIFA, porque no quisieron arreglar de buena manera”.

Arroyo se entrenaba este diciembre con Liga de Quito, club cuyo técnico, Pablo Marini, destacó las virtudes futbolísticas del guayaquileño, pero que no lo ha fichado. “Yo quiero jugar en Liga”, se sinceró.

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Gambetita se unió a Barcelona por segunda etapa en 2018; no apareció en 2019 (por la sanción) y se reintegró para 2020, siendo parte del campeonato logrado. También fue canario en 2012 y 2013, el primer año logrando el título nacional.

Arroyo se formó en Emelec y se estrenó en primera en 2005, de acuerdo con la página de registros de la Federación Ecuatoriana de Fútbol.

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Fue monarca de Ecuador también con Deportivo Quito en 2009.

Militó por otros clubes del exterior como los mexicanos San Luis, Atlante, América y el brasileño Gremio.

Sobre Liga (Q)

No hay ninguna posibilidad de llegar a Liga. Ya lo hablamos, agradeciendo al profe (Marini) y a la gente de Liga, regresé tranquilo a Guayaquil. Al profe lo tuve en Atlante, en el fútbol mexicano; siempre tuvimos una amistad muy cercana, somos grandes amigos. Todo el mundo habló mal del profe. Le dije muchas gracias, pero vi mucha maldad por la posible llegada a Liga, no quería que le hicieran daño”, dijo Arroyo.

Y sentenció respecto de sus sanciones por dopaje: “No es que yo era drogadicto o que yo soy un drogadicto. Yo sí cogí un cigarrillo (marihuana, cuando fue sancionado en 2007), pero la gente a veces se equivoca. Cuando te ven, te gritan ‘drogadicto’, porque ya quedé marcado, pero no es así. La verdad, ya no tomo, estoy con mi familia. Y no fue suspensión por dopaje (la de 2018); tengo los documentos que prueban que no fue cocaína ni marihuana, como dicen. Todo el mundo habla mil cosas”. (D)

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