No fue el mejor día para Richard Carapaz en la Vuelta a España. Al mal rato que pasó en el ascenso al Picón Blanco se sumó una penalización en dinero y tiempo que lo dejan rezagado en la clasificación general, de la que ocupa el puesto 27 al cierre de la tercera etapa.

La Locomotora sufrió en el último ascenso y debió esforzarse para volver a conectar con el grupo principal, en ese tramo la organización identificó un “avituallamiento no autorizado” y aplicó el reglamento al corredor del Ineos Grenadiers.

El informe del colegio de comisarios al cierre de la jornada detalló que el campeón olímpico sufrió una penalización de 20 segundos en la clasificación general y una multa de 200 francos suizos.

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Según el detalle presentado, al carchense se le aplicó el artículo 16.2 del Reglamento UCI, que habla de las carreras por etapas y que sanciona un abastecimiento inadecuado en los primeros 50 kilómetros y los últimos 20 de cada jornada.

Para esta jornada la organización estableció avituallamientos desde el kilómetro 30 hasta los 7,6 kilómetros antes de la meta, en el inicio de la subida a Picón Blanco, tramo en el que Carapaz recibió abastecimiento, según identificaron los comisarios.

Con los 20 segundos de penalización, el ecuatoriano cayó al puesto 27 de la clasificación general, para quedar a 2 minutos 15 del nuevo líder de la prueba, el estonio Rein Taaramäe, ciclista del Intermarché-Wanty-Gobert Matériaux.

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Pese al mal momento, “chulla vida”, posteó Carapaz en sus redes sociales, que en relación a los principales aspirantes al título quedó con diferencia de 1 minuto 45 segundos del esloveno Primoz Roglic (tercero), 1 minuto 18 segundos de su compañero Egan Bernal (noveno) y a 13 segundos de Hugh Carthy, vigésimo cuarto clasificado tras un día en que la general sufrió un cambio radical. (D)