Hace 25 años el público guayaquileño vio por primera vez, en la Casa de la Cultura, núcleo del Guayas, Crónica de luto cerrado... bueno no tan cerrado. Es una de las piezas de danza teatro más emblemáticas puestas en escena por los miembros del Centro Cultural Sarao, y este 2018 la obra vuelve con nuevo elenco, pero con la misma esencia.

“La propuesta básica de Crónica de luto cerrado es advertirnos de aquellos miedos terribles del ser humano y sobre todo el más fundamental, el que le tememos a la muerte”, cuenta su director, Lucho Mueckay, sobre esta obra que se prevé estrenar este jueves, a las 21:00, en el Estudio Paulsen (Las Peñas).

Dice que “de una manera muy irreverente” se burlan de la muerte “como una manera de presagiar o reflexionar que es algo que inevitablemente va a ocurrir y que lo importante es la vida y obviamente en cómo la disfrutamos”.

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El director guayaquileño, quien en 1993 encarnó a uno de los personajes de la propuesta, comenta que en esta reposición también usan este “sesgo cómico”, porque cuando se hace humor este “finalmente se basa en grandes dolores, en grandes verdades y este es un gran dolor, la muerte de alguien causa mucho dolor y es una realidad a la que vamos a estar irremediablemente enfrentados”.

Mueckay argumenta que la idea de traer a la memoria este “velorio suigéneris” se da porque “la forma de ver teatro y danza en esta ciudad han cambiado”. “Queríamos obviamente reponer esta experiencia, que el público venga y readecuarla, reformarla para las nuevas generaciones... vamos a ir mucho más allá del divertimento para llamar la atención”.

Cuando hace más de 20 años se puso en escena Crónica de luto cerrado... bueno no tan cerrado el elenco estuvo conformado por Tani Flor, Jorge Parra, Omar Aguirre, Fanny Herrera, Marjorie Fajardo, Fernando Rodríguez y Lucho Mueckay. Ahora el reparto es otro (Hanoi Mueckay, Andrés Vivar, Adrián de la Cruz, Tomás Sandoval, Denisse Boss, Daniel Ortega), pero con un denominador en común: Fanny Herrera. En la obra Herrera repite su rol de la modelo superficial, papel que la artista –dice– ha tomado como un reto.

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Crónica de luto cerrado... bueno no tan cerrado es una de las actividades con las que Sarao recuerda sus tres décadas de existencia. La historia luego declararía a esta agrupación como la precursora de la danza contemporánea en la ciudad, algo con lo que su director se siente muy satisfecho, porque “en 30 años Sarao no solamente implementó un sistema de danza o una práctica de danza teatro, sino que hizo producciones que mezclaban una danza con mucha teatralidad o teatro que incluía danza ”.

Reservas: 604-2597 y 096-018-9636 (I)