Todo se inicia con la vista en blanco y negro de un parqueadero, en el que lentamente empieza a escucharse la voz del artista uruguayo que ha visitado nuestro país en algunas ocasiones, cantando a capela, solo con un shaker en la mano, un poco de Transporte, con un atuendo algo trespatinesco, si se quiere. Hasta que llegó finalmente al escenario, donde cambió su sombrero por su hermosa guitarra Gibson ES-175, para así poder terminar la canción.