La actriz británica Keira Knightley ha aumentado una cláusula en sus contratos cinematográficos, y ha decidido no actuar desnuda en producciones donde el director sea hombre desde 2015. Esto se debe a un tema de vanidad, explica la actriz de 35 años en el podcast Chabnel Connects.

A la actriz le incomoda exponer su cuerpo en el set de rodaje desde el nacimiento de sus dos hijas: Edie, de 5 años, y Delilah, de 1. “Soy demasiado vanidosa y mi cuerpo ya tuvo dos hijos, así que preferiría no pararme desnuda frente a un grupo de hombres”, aseguró. “Me siento muy incómoda ahora tratando de retratar la mirada masculina”.

Con respecto a las escenas sexuales, Knightley admitió que en ocasiones entiende que una escena así "podría quedar muy bien en la película”, pero como respuesta dijo: "para eso solo se necesita a alguien que sea atractivo” y pueden contar para esas secuencias con otra persona que no sea ella, a menos que la película sea dirigida por una mujer. (E)