Familiares, amigos y allegados a la fallecida historiadora guayaquileña Jenny Estrada Ruiz se dieron cita la tarde del viernes 8 de marzo, en el Archivo Histórico del Guayas, para celebrar sus logros y legado en el marco del Día Internacional de la Mujer.

El auditorio de la institución convocó a un centenar de personas que aplaudieron y se emocionaron con la intervención inicial de la abogada y doctora en Leyes Katia Murrieta, quien adjudicó a Estrada el mismo título con la que ella bautizó a Matilde Hidalgo de Procel en su biografía (1981): Una mujer total.

Murió Jenny Estrada, una inquieta creadora que llevaba en sus venas la pasión por las costumbres y tradiciones de Guayaquil

“Recibimos este homenaje con mucho agradecimiento, con el corazón profundamente conmovido de comprobar una vez más que Guayaquil es una ciudad de gente que valora y que aprecia lo que se da de corazón”, dijo para este Diario Lorena Tinoco, sobrina de Estrada.

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“Y esto es importante, porque generalmente decimos que los artistas, poetas, músicos, intelectuales e historiadores no somos reconocidos aquí, pero no es así. Lo que pasa es que se reconoce el verdadero valor y la gente lo sabe reconocer”.

Junto con Lorena estuvieron presentes también, en primera fila, Ximena Chávez Estrada, hija de la historiadora, y los nietos de Jenny, Diego y Alejandra Chávez.

Desde la derecha: Diego Chávez, Lorena Tinoco, Alejandra Chávez y Ximena Chávez Estrada.

El encuentro incluyó la presentación de los músicos y compositores Alfredo García y Vicente Arboleda, quienes compartieron con los asistentes el pasillo inédito Catarsis de amor, seguido de Ángel de luz.

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La cantante Mariel Córdoba y el pianista Omar Domínguez, amigos de Jenny, pasaron al frente para entonar algunos de los tangos favoritos de Estrada. “Estoy tratando de vencer un poco la emoción que nos embarga. Para ti, Jenny querida, el tango que tanto te gustaba”, pronunció Córdoba antes de interpretar Nostalgias, de Carlos Gardel.

Otro de los temas elegidos para el homenaje fueron Caminito y El día que me quieras.

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La historiadora Mirna Jurado de Cobo se hizo presente con un poema y un acróstico en honor a Jenny que despertó la sensibilidad del auditorio.

Como cierre, se proyectó un video que resumió algunas de las últimas actividades de Estrada, entre ellas, la charla sobre la historia de la fotografía en Guayaquil, en el mismo Archivo Histórico del Guayas, y cuyas imágenes permanecen expuestas.