Luego de que Gisele Bündchen solicitara el divorcio a Tom Brady el pasado 28 de octubre, una fuente cercana a la pareja reveló a Page Six que la modelo y el futbolista de la NFL tuvieron un “prenupcial férreo”, por lo que resolvieron rápido su separación y la división de su patrimonio.

Gracias al acuerdo que firmaron en el año 2009, cuando se casaron, la expareja protegió sus intereses personales, que combinados, sumaban alrededor de 733 millones de dólares, incluyendo propiedades y múltiples negocios.

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El millonario divorcio de Tom Brady y Gisele Bündchen

La leyenda de la NFL es, sin duda, el futbolista más millonario de todos y la supermodelo tiene varios años siendo la mejor pagada de todas, por lo que su patrimonio neto es casi milmillonario.

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Brady, de 45 años, y Bündchen, de 42, facilitaron las cosas para su divorcio. “Hubo un acuerdo prenupcial blindado establecido antes de que se casaran en el 2009″, dijo una fuente al medio este miércoles 2 de noviembre.

“Ambos tienen sus propias entidades comerciales separadas, por lo que la separación de su patrimonio no fue tan complicada al final. El único otro factor importante fue dividir su enorme cartera de propiedades”.

El atleta con una riqueza estimada en 333 millones de dólares, se quedó con la propiedad total de la mansión de 17 millones de dólares ubicada en Indian Creek Island de Miami. Mientras que Bündchen, con un patrimonio neto de 400 millones, mantendrá su casa de vacaciones en la Península de Nicoya en Costa Rica.

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Además, ella compró discretamente una modesta casa de 1.25 millones de dólares en Miami Beach en febrero y, según los informes, también compró una “gran propiedad” en el área de Miami.

Los exesposos también poseían una casa en las Bahamas, una casa en el Yellowstone Club en Montana y el apartamento en la ciudad de Nueva York donde Bündchen se refugió mientras corrían rumores sobre su separación.

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La fuente afirmó que, incluso antes de que la modelo nacida en Brasil solicitara el divorcio, ya habían resuelto los términos de la separación y la división de la riqueza.

En cuestión de horas, el divorcio se formalizó y los ahora solteros esperan compartir la custodia de sus dos hijos, Benjamin y Vivian, de 12 y nueve años respectivamente. Además, el futbolista tiene un hijo de 15 años llamado Jack con su ex Bridget Moynahan.

Según la prensa internacional, Gisele solicitó el divorcio porque sintió que su pareja “no fue tan atenta como debería haber sido”, aunque People publicó que Brady “estaba realmente tratando de arreglar las cosas”. (E)

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