En un nuevo episodio del pódcast Work in Progress, conducido por la actriz Sophia Bush, la ex primera dama habló con una claridad poco habitual sobre su actual proceso de autodescubrimiento, el derecho a tomar decisiones por sí misma y la presión social que aún siente por “no decepcionar a los demás”. Todo esto, en medio de crecientes rumores de divorcio con su esposo, el expresidente de Estados Unidos Barack Obama.
“Podría haber tomado muchas de estas decisiones hace años, pero no me di esa libertad”, confesó Michelle, refiriéndose a su necesidad de reconstruir una vida más allá del deber público, de su maternidad y por supuesto, la trayectoria política que compartió durante años con Barack Obama.
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“Este año tomé una decisión pensando en lo que era mejor para mí. No lo que tenía que hacer. No lo que los demás esperaban que hiciera”, explicó, haciendo referencia a la necesidad de establecer límites y redescubrir su identidad como mujer independiente.
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Las redes sociales, sin embargo, no han tardado en llenar los vacíos. “La gente no podía imaginar que estuviera tomando decisiones por mí misma. Tuvieron que decir que mi esposo y yo nos divorciamos”, dijo con franqueza.
A pesar de los rumores, los Obama siguen casados y, según una publicación reciente de Barack en redes sociales, celebraron 32 años juntos en octubre pasado. (E)
