Moisés Caicedo compartió con el mundo su llegada al club de fútbol Chelsea, y lo hizo de la manera más especial: con su madre. el Niño Moi y Carmen Corozo no solo le regalaron una alegría a Ecuador ayer -ellos juntos es todo lo que está bien en este mundo-, sino que también fue la manera más dulce que un hijo puede decirle: gracias mamá, este triunfo es para ti.
Y es que fuera de la cancha, Caicedo mantiene una conexión fuerte con su familia, a quien deseaba enorgullecerlos. “Mi meta en la vida es darles la felicidad que merecen”, dijo el jugador en un post en el 2018, en el que publicó una foto con sus padres y uno de sus hermanos.
El jugador de 21 años se siente motivado por sus padres y tenerlos cerca es primordial para su crecimiento profesional, es por esta razón que se los llevó a vivir con él a Brighton, Inglaterra. “Terminar el entrenamiento y pensar que mis padres están en casa es algo muy emotivo”, declaró a Star Plus.
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Su adaptación en el país tuvo sus dificultades, pues al inicio estaba solo y debía no solo acostumbrarse al idioma, sino también a la comida, al clima, al horario y a los entrenamientos, que eran mucho más rápidos y dinámicos. “Mi familia me alentaba a seguir”.
En un especial de Star Plus (En primera persona) el jugador dijo que su humildad, amor a Dios y su familia eran las piezas claves en su éxito y su fortaleza.
“Mis papás siempre se esforzaron para darnos lo que ellos tuvieron, y la verdad que me siento feliz de tenerlos como padres porque nunca nos dejaron solos, siempre estuvieron”, expresa en la entrevista disponible en la plataforma de streaming.
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El joven jugador reveló a lo que se dedicaban antes sus padres, pues proviene de una familia muy humilde. Su papá trabajaba en un triciclo, haciendo carreras, mientras que su mamá lavaba ropa de los vecinos. “Esos ingresos eran para la comida y para darles un techo”, cuenta.
“Nuestra casa era muy pequeña, pero nos acomodábamos para dormir. Así que nunca nos faltó un techo, porque mis padres siempre se esforzaban para que a la casa no entrara agua”, agrega el menor de diez hermanos.
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Sus orígenes
El Niño Moi nació el 2 de noviembre de 2001 en la ciudad de Santo Domingo. Su último Mundial, antes de ser jugador profesional, fue cuando solo tenía 12 años, en el 2014. Recuerda que para ver el partido de Ecuador en este certamen tuvo que prestarle el televisor a un amigo, ya que él no tenía señal pagada. “Con mi gente del barrio sacamos una tele, bueno no era mía, sino de un amigo”, recordó de este momento en la entrevista con Star Plus.
Mientras veía el partido en la calle soñaba con estar allí. “Algún momento tengo que estar ahí, dándole alegría a mi barrio y a todo un país”, expresó el joven que el año pasado vivió su primer Mundial de Fútbol. (E)
