Tras un poco más de 20 años en los que ha cantado en coros de otros artistas, colaborado en composiciones y producciones de otros más, incluso haciendo covers, el músico Carlos David Vaca siente que es su turno de salir a escena e interpretar su propio material y sentimiento. Así nació su seudónimo David (pronunciado como en el inglés) Kam. Kam, dice, por su afición a las historias bíblicas.
“Cuando era chiquito escuchaba la historia de uno de los hijos de Noé, que es Cam. Él dejó muchas cosas por su familia, me gustó mucho esa historia. Desde entonces quedó el Kam en mi cabeza”, cuenta el artista de 44 años.
Aunque se trata de un proyecto naciente, David ha incursionado en la movida artística desde muy joven, recuerda. Uno de sus primeras experiencias musicales fue al lado de Martín Galarza, AU-D. “Soy cantante toda la vida desde que tenía 19 años. Trabajé con AU-D por mucho tiempo, todavía canto con él cuando me llama, porque llegamos a un acuerdo”.
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Su evolución lo llevó de hacer coros a trabajar en estudios, después en el suyo propio. Consecuentemente, encontró aquí su profesión y desde entonces a eso se dedica. “Primero lo tomé como hobby, luego me fui dando cuenta de que era lo que más me apasionaba. Me aconsejaron que lo estudie, alcancé las metas que quería, como componer canciones”. Se formó en el Conservatorio Antonio Neumane y en una universidad de Cuba.
Incluso, agrega, se siente orgulloso de haber colaborado en la composición de El innombrable y Adictivo, de Dayanara; de haber trabajado además con Rocky & Blasty, entre otros.
“Ahora me atreví, después de tantos años, a hacer mi disco. Me dije: ‘voy a poner todos esos conocimientos que aprendí para poder trabajar estas canciones’. Me gusta la salsa bastante”.
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La salsa guayaquileña de David Kam
El artista David Kam se presenta a la escena musical cantando salsa. Escogió este género inspirado por el clima tropical de la zona, para sentirse más conectado con lo latino. “Traté de hacer una búsqueda de uno de los mejores productores de aquí de Guayaquil, del Ecuador, de salsa. Él es Pedro Chinga, el ‘mayimbe de la salsa’, que es bastante conocido en este ámbito”, relata el cantautor.
Con él, comenta David Kama, le gustaría impulsar un movimiento en el cual Ecuador se pueda identificar con la salsa, como sucede con otros países, que tienen su “propia salsa”, como la salsa colombiana, salsa cubana, salsa panameña, salsa puertorriqueña... “Nosotros tenemos el Pacífico, estamos acá en Sudamérica, tenemos también los ritmos que nos permiten crear un movimiento de salsa guayaca”.
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De hecho, adelanta, así se llamará su primer disco: Salsa guayaca. Ya su primera canción está disponible en todas las plataformas. Se trata de Cuánto daría. “Es una canción que habla de una persona que le gusta una chica, o un chico, y le dedica esto con palabras que uno dice a diario... Por eso trato de meterle frases de Guayaquil, para que se identifique más con nuestras huellas. Gracias a Dios nos está yendo bien”.
Escena musical ecuatoriana
¿Por qué apostarle a la salsa en Ecuador? A decir de Kam, la corriente de salsa ecuatoriana está en crecimiento. “Más que apostarle a un ritmo, estoy apostándole a un movimiento que creo que puede ser muy fuerte y muy bonito, porque hay bastante gente detrás y que se pueden beneficiar y se pueden juntar también. Hay muchos salseros mejores que yo. Soy humilde en esto, pero voy a tratar de hacer que la gente escuche más y abrir más este campo, porque ya está abierto, pero la verdad es que hace falta más exposición”.
Para David Kam, actualmente el momento para los artistas ecuatorianos es “un poco difícil”, pero lo toma con optimismo. “Cuando uno toma la música no como un hobby, sino como un trabajo en realidad se comienzan a ver frutos. No solamente en la música, el país atraviesa un momento duro en todos los aspectos. Tenemos que esforzarnos y dar lo mejor. Hay muchas competencias, pero está bien, el público es el que decide y nosotros tenemos que trabajar para entretener”. (E)
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