El artista británico que recientemente cumplió 80 años acaba de estrenar esta polémica reversión que venía dando mucho de qué hablar en el mundo de la música. Las expectativas eran altas, ya que han pasado cincuenta años desde la publicación del original de The Dark Side of The Moon (TDSOTM), que en aquellos tiempos cambiaría la historia de la música contemporánea gracias a Pink Floyd, que contaba con el mismo Roger Waters (bajo, voz), David Gilmour (guitarra, voz), el fallecido Richard Wright (teclados, voz) y Nick Mason (batería).

En esta ocasión, podemos escuchar algo muy distinto, alejado totalmente del rock y lo eléctrico de los setenta y volcado más hacia lo orgánico y acústico. Todo empieza con Speak To Me y una tenebrosa voz de Waters guiando el camino de estas canciones de forma muy íntima y sentida. Si bien la misma no es muy melodiosa, es única e inconfundible. Luego llega la inolvidable Breathe, ejecutada con una guitarra acústica, nos hace dejar a un lado la original y amar la actual.

On The Run parece ser un consejo de vida de parte de Roger para todos sus oyentes y seguidores, de parte de alguien que lo vivió todo, pero quiere seguir viviendo y más aún, quiere seguir haciendo música. Time puede ser considerada, sin duda alguna, un nuevo éxito y, citando uno de sus versos: El sol es el mismo de alguna manera, pero tú estás más viejo. Eso define con claridad esta impecable producción que ahora incluye arreglos de cuerdas, teclados, moduladores e incluso sonidos de ambiente.

Publicidad

Great Gig in The Sky olvidó esa voz envidiable de 1973 y continuó con la calma que caracteriza este álbum, acompañado también de ciertas historias que relata Roger Waters en el transcurso de los temas, de manera sobria y segura. Money es por completo sombría, recordándonos lo crítico que ha sido el artista con el sistema económico y el capitalismo en el mundo, durante toda su trayectoria artística.

Abiertamente llega el comentario welcome to hell (bienvenidos al infierno), manifestando aquella inconformidad. Hasta ahora, son más que notorios los cambios, tanto en lo musical, como en lo conceptual.

Us and Them debe ser una de las canciones más fuertes, sin dejar de lado el folk y lo acústico, pero recordando la improvisación y los arreglos setenteros de Pink Floyd.

Publicidad

Any Colour You Like coquetea un poco con el ritmo; lejos del rock, hace pensar en el avant garde como identificación para este trabajo que empieza a acercarse al final con una carcajada de Waters, al inicio de Brain Damage, esa canción que dice: Te veré en el lado oscuro de la luna, en esta ocasión con una voz un poco más cálida.

Eclipse concluye con esta reversión muy distinta, ahora llamada The Dark Side of The Moon Redux.

Publicidad

No se puede hablar de mejor o peor, pero sí podemos decir que al igual que hace medio siglo TDSOTM es muy distinto a lo que suena en la actualidad. (O)