Minutos antes de que empiece la entrevista, la cantante colombiana Lady Noriega es abordada por un fan quiteño con una petición: que le firme un disco de acetato de aquel primer álbum que ella lanzó en 1997: Piel. “¡Después de 30 años tienes el autógrafo!”, se la escucha decir.

“Me acaba de sorprender con un acetato, un disco mío de hace años, para que se lo firmara, fue un gesto muy lindo”, dice al ser presentada con esa producción temprana, de la que se desprende uno de sus temas más populares, Maldito amor. “Me impresionó cantidades, porque ni siquiera yo tengo acetatos míos. Tengo CD. Fue muy impactante ver el tamaño de la carátula y la contracarátula con todas las canciones. Es un superrecuerdo”.

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Maldito amor y otras canciones de Piel volverán a sonar en vivo en Ecuador en la voz de Lady, en la gira que traerá a Quito y Guayaquil, después de haber empezado en Medellín y continuado en Bogotá. Sí, los que la siguen desde los noventa podrán escuchar también Pecado mío y La candelosa, pero también las más recientes Me paro en la raya, Las tienes de adorno, Mi soledad y yo, Culpable. También viene con su último sencillo, La rumbera.

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“Es que tú en un concierto tienes que cantarle a la gente lo que han venido escuchando desde tus inicios hasta el día de hoy, entonces es un recorrido cronológico a través de la música”. Y aunque viene dispuesta a mostrar lo nuevo, quiere que se sepa que a ella no le molesta que le pidan que cante una y otra vez sus primeros éxitos. “Para uno es muy importante que haya canciones que sobrepasen el tiempo. Como Maldito amor, la gente la sigue pidiendo y a veces me toca cantarla dos veces en concierto. Uno como artista se siente feliz y agradecido con su público; no tiene que ser la que está de moda, la que se acabó de lanzar, la que están escuchando en el momento, sino esas que se han vuelto clásicos y que las recuerdan porque las han bailado, las han cantado, se la han disfrutado. Para uno, como artista, es un gran tesoro tener un repertorio que traspase los años”.

Y ahora, Lady Noriega quiere trascender con La rumbera, hecha con la fórmula ganadora de despecho y fiesta. “La letra dice: Después de tanto sufrir, creo que por fin aprendí que sin hombres se puede vivir, sin hombres también se es feliz. Digamos que el arranque es el lamento de una mujer que se cansó de sufrir y de pasarla mal, y está con sus amigas desahogándose, contándoles lo que le ha pasado y siente ese acompañamiento, ese apoyo. Definitivamente, el despecho con amigos previene dolores y cosas mucho más graves. Es muy importante tener a alguien que nos valore, que nos aprecie, que nos quiera ahí al lado. El no sentirse solos al estar pasando por un mal momento es muy importante”.

Cuando llega al coro, la tristeza se ha olvidado. “Es muy liberador, ella sale y se enrumba con sus amigas y ve el mundo diferente. Los seres humanos tenemos ese poder de decisión, de decir: ‘Me quedo en mi pasado llorando o sigo adelante y miro el mundo con agradecimiento y con buena cara y dispuesto a disfrutar lo que me queda este camino”.

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Asegura que esa ha sido su actitud ante las adversidades. “Nadie está exento de fracasos, de dolores. Mi actitud siempre ha sido: ‘Ya lo lloré, ya lo sufrí, se queda en el pasado y sigo adelante’”.

Me gusta la fiesta, pero con despecho. El despecho bailable, como le digo yo, es muy delicioso de interpretar.

Lady Noriega

‘María Soledad’: cómo Lady Noriega se convirtió en actriz principal en Ecuador

En 1995, unos pocos años antes de Piel, Lady debutó como protagonista de una telenovela rodada en Ecuador, María Soledad, en la que el galán era su compatriota Mario Urquijo, y en el papel de Elena, su mentora, estaba Estela Álvarez (fallecida en 2024). “Con Estelita yo me llevaba muy bien. Era una superactriz”.

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Reconoce que en esa época (tenía menos de 25 años) estaba “muy niñita”, recién salida del reinado (representó al departamento de Córdoba en el Concurso Nacional de Belleza de Colombia en 1991), había hecho dos o tres papeles antagónicos en Colombia, y tuvo que trasladarse a vivir un año en Guayaquil. “Nunca lo voy a olvidar. Disfruté mucho conocer la cultura de acá, la comida, la gente”.

¿Le gustaría volver al mundo de las telenovelas? “Nunca he renunciado”, dice la artista, que estuvo en Cuando vivas conmigo (Caracol, 2016). “Simplemente hay épocas en que llegan oportunidades que vale la pena hacerlas y otras en que te dedicas más al tema musical. Estuve (en 2022) en MasterChef Celebrity Colombia, y me están proponiendo participar en otro reality, así que lo estoy pensando”. Pero por ahora sigue concentrada en la música.

En esta área también hay zonas difíciles, como su reciente denuncia de no haber recibido el pago correspondiente a la venta de su catálogo musical en la época en que ya había cantado Llegaste, Pecado mío, La candelosa y Luna llena, que formaron parte de la banda sonora de Pasión de Gavilanes (2003). Ella explica que el tema de los derechos de autor es complejo, y que en su país existen el derecho autoral, regulado por Sayco, el de intérprete (Sinpro), y que con ninguno ha tenido problemas. “Y hay un derecho mecánico o de difusión, que se genera cuando tu música hace parte de una película o un seriado televisivo”. Aquí, una editora debe recaudar las regalías y pagarlas al artista. En su caso, la editora no cumplió con su compromiso, y además, vendió su catálogo a otra empresa, sin pagar a los afiliados.

Lady ha estado haciendo indagaciones, esperando que la oficina de la Dirección Nacional de Derechos de Autor de Colombia cite a las partes, para luego hacer una reclamación legal. “Es muy triste, porque después de 20 años de que tu música ha rodado por todo el mundo, de que la novela se ha repetido y repetido, sigue en plataformas digitales, está en Netflix, y yo no he visto un centavo de los derechos mecánicos”.

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La cantante no pierde su aire alegre, sin embargo, y pide al público ecuatoriano que vaya preparado para bailar. “Mira, no hay nada que me guste más a mí en la vida que cuando yo estoy cantando la gente se pare a bailar y a cantar. Es la máxima expresión de que están gozando un concierto”. Aún no hay fechas para sus presentaciones, pero pide estar atentos en sus redes sociales, porque allí publicará las fechas de sus compromisos en Quito y Guayaquil. “He estado en esas ciudades, en Cuenca, en Santo Domingo de los Colorados, en Esmeraldas. Vamos a ver qué pasa con este nuevo lanzamiento”. (E)