La cantante estadounidense Beyoncé vivió un momento inesperado en la primera noche de su esperada presentación en el NRG Stadium en Houston. Durante su aparición en su icónico auto flotante rojo, elemento central del tema 16 carriages, se quedó suspendida en el aire mientras el vehículo comenzó a inclinarse peligrosamente.
Con voz calmada, para no alterar a la multitud que la acompañaba, la superestrella pidió a su equipo detener la música. Mientras ella agradecía a sus fanáticos por la paciencia, mientras se resolvía el percance técnico, los integrantes de la producción del espectáculo bajaron lentamente el auto hasta el escenario.
Este detalle obligó a la intérprete a sujetarse de la bandera que estaba en el vehículo para mantenerse segura. El silencio en el estadio fue momentáneo mientras el público comenzó a aplaudir a la cantante cuando estuvo y fuera de la plataforma.
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La artista de 43 años salió ilesa y prosiguió con el concierto, agregando a modo de broma que “si alguna vez caigo sé que ustedes me atraparán”. (I)
