En el bar El Colonial, en la zona rosa de Guayaquil, la charla de los clientes se mezclaba con las canciones de los años 80 que sonaban en los altoparlantes. Grupos de amigos, solos y en parejas llegaron la noche de este viernes, 12 de abril, a este establecimiento para disfrutar del primer fin de semana sin estado de excepción y por ende sin toque de queda o restricciones de movilidad.

Si bien el horario sin restricciones ahora permite a algunos locales atender hasta las 03:00 y 04:00, la concurrencia de clientes se observó desde poco antes de las 18:00.

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Según los propietarios y administradores de los establecimientos, las personas estaban esperando el fin de las restricciones para salir a disfrutar como antes y, por ello, la afluencia se registró desde temprano.

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“Ya queríamos que todo vuelva a ser como antes, quisiéramos también que todo vuelva a ser tranquilo como era antes”, dijo una de las personas que llegó a El Colonial, icónico bar que tiene más de 40 años en el centro de Guayaquil.

En este sitio, poco antes del fin de las restricciones, se implementaron las matinés como una opción para clientes que buscaban alternativas de esparcimiento y más seguras entre la tarde y noche.

María José Salinas, dueña de El Colonial, dijo que ahora sin el toque de queda la expectativa para la recuperación es elevada. “Estamos felices de que otra vez vamos a retomar nuestro ritmo, luego de la para que hubo a inicios de año”, señaló.

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“Esto es un nuevo despertar, la vida nocturna de Guayaquil ya se va despertando y esperemos que sea como antes”, manifestó uno de los propietarios de un bar ubicado en la zona rosa de la ciudad.

Desde el pasado 8 de abril, las reservas comenzaron a repuntar en los negocios.

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A partir de ese día, contaron los dueños de locales, grupos de amigos se volcaron a las redes sociales de los establecimientos para preguntar por presentaciones artísticas, disponibilidad de mesas y horarios de atención desde este viernes 12 de abril.

El Manantial, en Urdesa, empezó a recibir peticiones de reserva desde el 8 de abril. Foto: Ronald Cedeño

En el bar El Manantial, ubicado en Víctor Emilio Estrada y Las Monjas, en Urdesa, las reservaciones se empezaron a tomar desde el 8 de abril. Esto se reflejó en la ocupación de las diferentes áreas del establecimiento.

Este viernes el local estuvo lleno hasta las 20:00. Las pocas mesas vacías hasta esa hora ya estaban reservadas para grupos que llegarían entre las 21:00 y 23:00.

“Retomamos rutinas. Movimos presentaciones artísticas a otras horas, las reservas de algunos grupos ahora son más tarde, todo va en camino a recuperarse”, refirió el administrador de este establecimiento.

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Freddy Aguirre llegó con dos amigos y escogió una mesa en el exterior de uno de los bares de Urdesa la noche del viernes. “Queríamos ya sentirnos de nuevo en la normalidad, disfrutar un poquito y con moderación, sin restricciones”, mencionó el hombre.

Otro grupo de jóvenes quedó para celebrar un cumpleaños en uno de los bares de la calle Laureles, en Urdesa. “Ojalá que la vida nocturna sea como antes y tengamos la seguridad de salir como antes”, manifestó Orián Torres.

En los bares se mantiene la expectativa de la reactivación, tal como lo vivieron luego del confinamiento por la pandemia del COVID-19. Esto luego de la fuerte caída en ventas que tuvieron en el primer trimestre del año por las restricciones impuestas por el estado de excepción.

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Uno de los trabajadores de una discoteca ubicada en Víctor Emilio Estrada y Laureles señaló que para este fin de semana sin restricciones se han armado promociones y presentaciones en vivo para atraer clientela.

“Vamos apuntando a ganar, a recuperar las ventas y nosotros asegurar nuestro trabajo”, dijo el colaborador.

En este sector de la ciudad, dijeron los dueños de negocios, se observó un repunte en el movimiento pasadas las 17:00.

Entre los clientes y dueños de negocios también está la petición de rondas de seguridad. A la Policía solicitan patrullaje, sobre todo, pasadas las 22:00 cuando el flujo de usuarios se incrementa. (I)