La piel merece especial cuidado antes, durante y después de haberse expuesto al sol, aun cuando no vayas a meterte a nadar en la piscina o en el mar. Es necesario que sigas algunas recomendaciones para que no aparezcan manchas molestosas o puedas adquirir alguna enfermedad irreparable.

Leydi Piedra, dermatóloga de Aprofe Sauces 8, sugiere la importancia de “aplicar 20 minutos antes protector solar de amplio espectro en las zonas fotoexpuestas y reaplicarlo cada tres horas”.

El protector solar ideal debe brindar tanto protección para UVA así como UVB (tipos de radiación solar). Si se van a realizar actividades al aire libre en horarios de 09:00 y 16:00, que son de mayor intensidad de radiación, se recomienda además la utilización de accesorios como gafas, sombreros de ala ancha, camisetas de manga larga, estas últimas de preferencia tipo poliéster y de colores claros, que protegen más del sol.

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Es muy importante la hidratación continua, por eso es fundamental tomar agua de forma constante. En los niños menores de 6 meses la aplicación de protectores solares no está indicada, por tal motivo es mejor no exponerlos, agrega la dermatóloga.

Protector solar con más duración

Si va a la playa o a la piscina, el protector solar debe decir en el envase: resistente al agua. Así asegura una duración de 80 minutos en el agua. Cabe recalcar, enfatiza, que el mar y la arena tienen un poder de refracción alto de los rayos solares, por tal motivo si está en la playa es necesario reaplicar el protector así se encuentre en sombra.

Explica que la dieta también juega un papel importante, se indica que la dieta rica en caroteno (tomate, zanahoria), así también el consumo de té, café, vino y chocolate tienen un efecto fotoprotector y actúa como antioxidante disminuyendo el riesgo de cáncer de piel. (I)