Tengo a mi madre de 67 años, desde hace 35 sufre de depresión. Más tarde en la vida le empezaron ataques nerviosos y de pánico. Desde hace 5 años empezó a verla un psiquiatra, quien me dijo que era un tipo de demencia, porque escuchaba voces y veía cosas, y fue controlada con antipsicóticos. Hace 2 años me dijeron que era alzhéimer. Esta enfermedad me ha hecho ver a mi madre despersonalizarse poco a poco. Actualmente tiene alucinaciones, me confunde con otras personas, no duerme, pasa mal genio y eso la pone violenta. Tengo una niña de 10 años que le tiene miedo a la abuela. Estoy buscando algún centro geriátrico para que la cuiden, pero mi economía no es alta y veo solo opciones costosas. ¿Existen lugares que tengan buen cuidado y que el costo sea menor?
Celsa,
Guayaquil

Estimada lectora: sin detenerme en los distintos diagnósticos que ha recibido su señora madre, que ahora cuenta con 67 años, paso a aclarar el motivo de su preocupación, que no es otro que el encuentro de un centro al que pueda encargar el cuidado de la dama que presenta síntomas que alteran el equilibrio familiar.

Comienzo en señalar que los centros gerontológicos no son centros psiquiátricos. Son para personas ultrasexagenarias (mayores de 60 años), para crecimiento y desarrollo humano en esa etapa de la vida, es decir, no con patologías, o si las padecen, están compensadas.

Publicidad

Los hay de varios tipos: residencias (casas protegidas, hogares de tránsito, pensionados); centros diurnos (equivalente a una guardería), universidades de tercera edad, ateneos, círculos, comunidades. En el Ecuador los hay de toda clase y valor económico.

Ahora bien, para elegir se necesita hacer un recorrido por ellos para conocerlos y apreciar las bondades que ofrecen para el caso que nos acontece, incluyendo los valores económicos. Me permito recordar a la atribulada hija que existen instituciones como la Junta de Beneficencia, la Sociedad de Beneficencia Manabita, el Frente de Protección Social, que pueden orientarla en ese sentido, permitiéndole recorrer sus entidades.

Finalmente, debo decir que, con base en mi experiencia, el mejor lugar para cuidar a un añoso sano o enfermo es su hogar, entre los suyos, y que hay muchas opciones que, aunque no están en ninguna guía o menú de ofertas, con paciencia y cariño por el pariente mayor se pueden diseñar.

Publicidad

Dr. Aldo Guevara D'Aniello,
geriatra y gerontólogo.
Telfs.: 253 1558, 099 951 3229.