Por Rosanna Mancino V.

A lo largo de la Ruta Romántica recorrí un reino de castillos encantados y aldeas de cuento, donde la historia y la fantasía se entrelazan. Visitar Baviera es explorar la tierra de las valquirias, grandes músicos y un príncipe loco. Acompáñame a esos escenarios en los que aún se escuchan estas palabras mágicas: Había una vez…

Rothenburg ob der Tauber: un viaje en el tiempo

Esta ciudad medieval parece intacta desde hace siglos. En la Segunda Guerra Mundial, los soldados aliados, asombrados por su belleza, decidieron preservarla. Decidí explorar la ciudad desde una perspectiva diferente: un tour nocturno con el vigilante nocturno. Este recorrido, que se inicia en la plaza del Mercado, me sumergió en la vida medieval de la ciudad. A la luz de la linterna del guía, vestido como el antiguo guardián de la ciudad, paseamos por callejones oscuros y plazas iluminadas, mientras narraba historias de la guerra de los Treinta Años y las costumbres de los ciudadanos de Rothenburg. La atmósfera nocturna y las anécdotas del vigilante hicieron de esta experiencia un viaje inolvidable al pasado. Y para endulzar aquella fresca noche probé una schneeball, un dulce típico en forma de bola, cubierto de azúcar y chocolate

Füssen: donde los Alpes susurran historias

Enclavada entre montañas y ríos cristalinos, Füssen es famosa por su tradición musical y sus construcciones históricas. Pasear por el casco antiguo es como entrar en una pintura renacentista. Me maravilló su pequeño castillo, el Hohes Schloss, con sus frescos ilusionistas, y el Monasterio de San Mang, que guarda manuscritos del siglo VIII. Es la antesala perfecta para viajar al castillo más famoso del mundo.

Neuschwanstein: el castillo de los sueños

A pocos kilómetros de Füssen se alza el castillo que inspiró a Disney. Neuschwanstein es la fantasía hecha piedra del rey Luis II de Baviera, el ‘rey loco’ obsesionado con las óperas de Wagner. Nunca lo vio terminado, pero hoy es el castillo más visitado del mundo. Desde el puente de Marienbrücke, la vista es fantástica: torres blancas que desafían el acantilado envueltas en la niebla de los Alpes.

Oberammergau: la fe hecha arte

Este pueblo es conocido por su Promesa de la Peste: en 1633, sus habitantes juraron representar la pasión de Cristo cada diez años si sobrevivían. Desde entonces han mantenido su palabra. Pero Oberammergau es también un museo al aire libre con sus casas decoradas con murales pintados que cuentan historias. No resistí la tentación de llevarme un souvenir de Käthe Wohlfahrt, la famosa tienda alemana donde la Navidad brilla todo el año. Elegí un carrusel en madera, una pequeña obra de arte que captura la magia bávara en cada detalle.

La esencia de Baviera en primavera

Foto: Rosanna.Mancino

Para saborear Baviera, prueba los espárragos blancos de temporada con salsa holandesa, un manjar imperdible. Acompaña el viaje con la música de Wagner y Mozart, quienes dejaron su huella en estas tierras. Si quieres entender el alma de Baviera, lee La locura del rey Luis II de Baviera, de Jean des Cars, y sumérgete en la historia con la serie Sisi Emperatriz. Antes de partir, no olvides llevar un reloj cucú de Füssen, una joya de la artesanía local. Y si buscas inspiración cinematográfica, El maravilloso mundo de los hermanos Grimm (1962) te transportará a este escenario de cuento.

Estadía sugerida

  • Rothenburg ob der Tauber: Hotel Reichskuechenmeister.
  • Hotel en Füssen: Hotel Sonne.