Es algo que esperábamos... porque es una enfermedad que ningún ecuatoriano podía evitar (...). Todos estamos expuestos, todos los que viven en zonas tropicales o subtropicales, donde tenemos el vector”, decía el viernes pasado la ministra de Salud, Carina Vance, al referirse a los más de 8.000 casos de chikungunya registrados hasta esta semana en el país.