Con el objetivo de compensar las bajas ventas que registran en sus localidades, pescadores artesanales de Esmeraldas y Manabí, provincias afectadas por el terremoto del 16 de abril, participaron este miércoles en la Feria Inti Pallana (Cosecha del Sol) que se realiza el segundo miércoles de cada mes en los exteriores del ministerio de Agricultura, al norte de la ciudad.

Manuel Reyes, de la Cooperativa de Producción Pesquera Artesanal Puerto López, de Manabí, expresó que están vendiendo un 30 %, debido a que la ciudadanía -actualmente- no está comprando por la situación económica y a que los hoteles de la zona habitualmente no adquieren la pesca.

Señaló adicionalmente que la gente no sale a pescar porque las aguas están movidas debido a que las réplicas del terremoto continúan.

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Reyes, junto a varios de sus compañeros, comercializaron -en stands- camarón, corvina, cuyos precios oscilaron entre 2 y 6 dólares.

Además de las conchas ofrecieron al público langostino, camarón, robalo, mejillón, picudo blanco, calamar, dorado, corvina. Sus precios iban de entre 5 a 15 dólares.

Reyes considera a las ferias como una alternativa para suplir el descenso en ventas y tiene esperanza de vender su producción -etiquetada- en la Rueda de Negocios "Junto Reactivamos Manabí" en la que intervendrán varias cadenas de supermercados el 23 y 24 junio en el Centro Cívico Ciudad Alfaro en Montecristi (Manabí). Según el ministerio de la Producción, el objetivo del evento es la búsqueda de proveedores provenientes de Manabí con productos como: alimentos, bebidas, limpieza, higiene personal, textiles, decoración, artesanías, belleza, calzado, alimentos, accesorios deportivos y automotrices.

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En tanto, Pablo Demera, presidente de la Asociación de Producción Pesquera de San José de Chamanga (Esmeraldas), señaló que al ser el manglar una zona fangosa de donde extraen las conchas para la venta, podría haber peligro si se presentan réplicas del terremoto cuando estén realizando su faena.

Agregó que hay ciertas zonas afectadas pero otras que son estables, lo que todavía les permite trabajar. (I)