Los resultados de los estudios actuariales del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), cuya reserva fue levantada la semana pasada, revelan cifras contradictorias sobre el déficit actuarial de la entidad. Estos estudios habían sido declarados como reservados desde el 2013 por parte de la Superintendencia de Bancos, y ahora que el Consejo Directivo del IESS las publicó, dejan varias incógnitas.

Las diferencias aparecen en dos informes de Volrisk, empresa contratada por el IESS. En el primero, el déficit actuarial con corte al 2013 y con proyección al 2053 (en un escenario moderado) llegaba a $208.841 millones, que equivalía a más de dos veces el PIB del país. Este primer informe se emitió justo cuando el entonces presidente del IESS, Richard Espinosa, impulsó el cambio de tasas de aportación.

Sin embargo, en un nuevo informe, de julio del 2016, también con corte a 2013 y con proyección del 2053, el déficit baja a $ 20.464,4 millones.

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De acuerdo con fuentes del IESS, la diferencia entre ambos informes, es que en el primero se toma en cuenta la eliminación del 40% de la contribución del Estado al IESS que se decidió en abril del 2015. Esto pese a que el corte de dicho informe es diciembre del 2013. En cambio el segundo y más actualizado no toma en cuenta la eliminación del 40% y por ello el resultado actuarial es mucho menos preocupante.

Otra contradicción que se presenta en ambos informes es que en el primero se dice que el último año de reservas positivas para el fondo de pensiones será el 2026; pero en el segundo informe se indica que el último año positivo sería 2036.

La eliminación del 40% que debía hacer el Estado al IESS es un factor que puede elevar de manera significativa el déficit.

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Por ejemplo, según un estudio actuarial del 2010, realizado por la empresa Actuaria, se indicaba que el déficit actuarial era de $ 5.142 millones con las condiciones vigentes a esa fecha, pero se les había solicitado que hicieran un escenario posible con la eliminación del 40% de la contribución estatal el IESS y, en este caso, el déficit subía a $ 71.000 millones. Así lo comentó Rodrigo Ibarra, presidente de dicha empresa.

Además en ese momento, Actuaria recomendaba que en caso de ser eliminado el 40%, debería subirse al doble la tasa de aportes. Esto no sucedió y por ello actualmente el fondo de pensiones está siendo consumido año tras año. En 2015 ese fondo estaba en $9.200 millones, pero para el 2018 ya se encuentra en $ 7.500 millones, explicó. Así, según Ibarra, muy posiblemente ese fondo quedará desfinanciado para el 2022 si no se toman medidas correctivas.

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De acuerdo con Carmen Corral, exintendenta de Seguridad Social de la Superintendencia de Bancos, los dos informes de Volrisk son contradictorios. Explicó que no tiene sentido que en el primero hayan incluido la eliminación del 40% y en el segundo no, aunque en el momento en que ambos informes fueron presentados ya se conocía de esta medida.

Para Corral, es necesario que se realicen nuevos estudios actuariales porque estos del 2013 no sirven. Sin embargo, comentó que la situación actual del fondo de pensiones es grave, por lo que no se puede esperar a que se den los nuevos estudios actuariales (que tomarían seis meses al menos) para tomar medidas inmediatas.

Adicionalmente, Corral indicó que según su opinión, de manera inmediata se debería derogar la Ley 501 que cruza los aportes de los fondos, así como buscar inmediatamente el financiamiento para los hijos de los afiliados de entre 6 y 18 años. Explicó que la decisión sobre una posible restitución del 40% debería hacerse tras los estudios actuariales.(I)

Déficit
Según el informe de Volrisk el déficit actuarial pasó de $5.142 millones en 2010 a $20.464,4 millones en 2013, especialmente por efectos de la Resolución CD 318 de 2010.

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Resolución
En dicha Resolución el IESS decidió incrementar las pensiones jubilares por encima de la inflación, a través de una tabla proporcional.

El informe plantea varias medidas de ajuste

El último informe de Volrisk, de julio del 2016, hace una serie de recomendaciones para mejorar el tema del déficit actuarial, que en ese momento fue estimado en $ 20.446 millones.

Entre las medidas más importantes a tomar dice que se debería incrementar la edad de jubilación y que esto podría hacerse subiendo el número de años de la persona o pidiendo más aportes.

También se pide modificar el incremento de pensiones que constaban en la Resolución CD 318 del 2010. Este tema sí se trató en la Ley de Justicia Laboral, en la cual se regresa al cálculo normal a través de la inflación y se deja insubsistente la tabla de incremento, que según Volrisk incrementó de manera importante el déficit. También se plantea incrementar el monto de las aportaciones. Indica el informe que la tasa de cotización que cubriría el sistema actual del seguro de pensiones por los siguientes 40 años sería del 12,41 %.

Se plantea que las modificaciones se deben hacer bajo análisis técnico en el que es prudente considerar un tiempo de transición, para no afectar a los afiliados que tienen cercana la edad de jubilación y que probablemente ya esperan recibir un beneficio de acuerdo a las reglas actuales. (I)

Ordené al presidente  del Consejo Directivo del IESS que haga públicos los informes actuariales (...). Porque ustedes como mandantes tienen derecho a conocer la real situación del IESS. Lenín Moreno, presidente de Ecuador