Bonanza. Finales de 1960 marca el inicio de la actividad camaronera en la Costa ecuatoriana. Solo se necesitaba abrir las compuertas, llenar las piscinas de agua y las larvas entraban solas. Todo era de forma natural. Lo recuerda Luis Puertas, uno de los empresarios que empezó este negocio en Pedernales (Manabí), en el estero del río Cojimíes.