La firma del acuerdo comercial entre China y Ecuador, que se dio el 10 de mayo pasado, ya genera expectativas, aunque aún falta que entre en vigencia, no solo en los exportadores que apuntan a un mercado de 1.400 millones de personas, sino que el sector importador también proyecta una mayor diversificación de precios y productos asiáticos en sus catálogos en el país. Es el caso de los teléfonos celulares que en años pasados ya han sido beneficiados con reducción de aranceles en equipos y de impuesto en planes.