Los bancos, en aplicación de la normativa vigente, reportan de manera oportuna y periódica a la Unidad de Análisis Financiero y Económico (UAFE) aquellas operaciones o transacciones económicas que sobrepasan el umbral determinado en la norma, así como las operaciones inusuales, sospechosas o injustificadas, que salen del perfil transaccional regular del cliente.