El nuevo precio de las gasolinas extra y ecopaís sería de $ 2,72 incluido el impuesto al valor agregado (IVA) en ambos casos, cuando se elimine el actual subsidio. Aunque en un principio el ministro de Economía, Juan Carlos Vega, había dicho que habría dos precios, uno para la extra y otro un poco más alto para la ecopaís, al final se ha conocido que el precio será único. Sin embargo, ese precio es menor al que reporta Petroecuador en su página web como precio sin subsidio.

El precio actual es de $ 2,465 por galón. La empresa estatal reporta que el subsidio a la extra está en 46 centavos y la ecopaís en 66 centavos. Por lo que el precio sin subsidio debería ser $ 2,92 y $ 3,12.

Para el Gobierno, $ 2,72 es el precio internacional que tienen otras gasolinas comparables con la de Ecuador. Y una vez que el precio ya esté a nivel internacional el plan es aplicar la banda de precios de estabilización que permitirá incrementarlo hasta en 5 % mensualmente si el precio internacional sube o bajarlo hasta 10 % si este se reduce. No es necesariamente una liberación de precios, sino un ajuste a precios internacionales para luego fluctuar en la banda.

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¿Pero cómo determinaron ese precio y por qué es distinto al que maneja Petroecuador?

La explicación es que el cálculo que hace el ministerio es con base en un marcador internacional y en una metodología que se denomina precio de paridad de importación (PPI), que es un costo de oportunidad, es decir, cuál sería el valor si se importara. Petroecuador calcula con la metodología de recuperación de costos. Desde el Gobierno se piensa que la empresa debe mejorar sus costos. La empresa debe buscar mejorar sus procesos, controlar el robo de combustible a través de pinchazos. Así, Petroecuador debería hacerse cargo de sus pérdidas si no equipara su precio al internacional.

La próxima semana será clave para llegar a un acuerdo sobre las compensaciones que recibirán transportistas a fin de no incrementar tarifas para los ciudadanos.

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El secretario de la Administración Pública, Arturo Félix Wong, indicó el viernes pasado en Ecuador TV que el techo está establecido: con el precio internacional va a haber un 5 % al alza más y cuando baje podemos llegar hasta 10 %, esa es la idea, estar con los precios internacionales y que no exista especulación. Dijo que el ahorro de esta medida es de más de $ 620 millones anuales y que este “no va a ir a las arcas fiscales, este ahorro se va a ir distribuido en ayuda social, en implementar más familias beneficiarias del bono”. Y que la próxima semana esperan concluir con la socialización y los acuerdos.

Este es el más reciente capítulo de un Gobierno ecuatoriano que busca eliminar el subsidio a las gasolinas o al menos bajar el peso del mismo. Es que la historia de los subsidios en el Ecuador se inicia en 1974. Cada régimen a su manera lidió con el tema de dicho subsidio, pues en poco tiempo ya se había convertido en una importante carga fiscal.

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El secretario ejecutivo de la Cámara de Distribuidores de Derivados de Petróleo (Camddepe), Oswaldo Erazo, recuerda que los subsidios empezaron en el Gobierno militar en 1974 cuando se comenzó subsidiando a buses militares:

  • El primero en incrementar los precios había sido el presidente Jaime Roldós y en ese tiempo (1979-1981) -con moneda propia- subió de 4 a 15 sucres el galón.
  • Oswaldo Hurtado empezó a sentir la necesidad de bajar el subsidio y subió el precio a 33 sucres.
  • En la presidencia de León Febres Cordero, la gasolina bordeaba ya los 90 sucres.
  • En la de Rodrigo Borja se disparó a 400 sucres.
  • En el gobierno de Sixto Durán Ballén, el precio ya se incrementó a 2.500 sucres y
  • Abdalá Bucaram es recordado por intentar bajar el subsidio del gas licuado de petróleo.
  • Lucio Gutiérrez -ya con la economía dolarizada- había subido el precio de $ 1,20 a $ 1,48. Desde ese año quedó inamovible durante varios años.
  • En el gobierno de Rafael Correa hubo varios estudios para una focalización. Se retiraron subsidios a la industrial.
  • Solo en la administración de Lenín Moreno hubo un intento de eliminación de subsidio que llevó a protestas en las calles. También se dio un sistema de bandas.
  • Guillermo Lasso congeló los precios de las gasolinas regulares en $ 2,55. Sin embargo, tras las protesta de junio del 2022 se bajó el precio del galón y quedó congelado en $ 2,40.
  • Ahora, en el gobierno de Daniel Noboa, el precio de las gasolinas regulares (extra y ecopaís) se ajustó por el incremento del IVA del 12 % al 15 %, y así el galón subió de $ 2,40 a $ 2,46.

Erazo ve que el nuevo precio del cual va a partir el Gobierno no llega al precio internacional. Comenta que uno de los secretos mejor guardados de Petroecuador es el costo de refinación.

De acuerdo con Alberto Acosta Burneo, editor de la publicación económica Análisis Semanal, se ha conocido que entre 2005 y 2018 los subsidios costaron aproximadamente $ 54.000 millones y representa un desperdicio de recursos que hubiesen podido ir a educación y salud o infraestructura.

Precios de las gasolinas: súper baja a $ 4,11 y la extra y ecopaís siguen en $ 2,465

Acosta asegura que el rol de un subsidio no es alimentar vehículos sino ayudar al bienestar de los ciudadanos a través de servicios de calidad. Tampoco es un argumento decir que el sector productivo se vuelve menos competitivo sin los subsidios. Asegura que Perú tiene mayores precios de combustible y no es menos competitivo.

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Para Acosta Burneo, la modificación inicial de 25 centavos más al precio no va a ser suficiente para llegar a un precio internacional. Cree que el tema del costo de producción debe interesarle a Petroecuador, pues debe ser eficiente y tener balances transparentes. Sin embargo, considera que el sistema de refinación de la empresa petrolera estatal es una suerte de caja negra porque no existen datos. (I)