¿Qué tanta basura se acumula en las playas de Ecuador? ¿De dónde viene toda esta basura y qué podemos hacer para erradicarla? Estas son algunas de las preguntas que Científicos de la Basura, una organización ambiental chilena, busca responder a través de muestreos y análisis científicos desde 2007.

Su objetivo es complejo, pero no imposible: documentar la cantidad y el origen de la basura para prevenir la contaminación marina a lo largo de la costa del Pacífico en Latinoamérica. Para lograrlo, la organización trabaja con escuelas, colegios y fundaciones locales voluntarias que quieran participar en los estudios.

Nelson Vásquez, biólogo marino y director de Científicos de la Basura, describe a la organización como un “programa de ciencia participativa”, pues su objetivo es incluir a la ciudadanía en los procesos de investigación y divulgación.

Publicidad

Amazonía de Ecuador pierde más carbono forestal del que gana

“Las personas no solo reciben información de parte de un científico, sino que participan directamente en los estudios y hay un nivel de empoderamiento que va mucho más allá”, explica Vásquez en una entrevista con EL UNIVERSO.

Este año se evaluaron tres playas en Santa Cruz, en las islas Galápagos. Allí, estudiantes y voluntarios de una escuela y una fundación local trabajaron en el proyecto a través de un muestreo de los desechos presentes en Tortuga Bay, la playa de los Alemanes y la Ratonera.

Muestreo en Tortuga Bay. Foto: cortesía de Dayana García.

El maquilishuat, árbol nacional de El Salvador, fue sembrado por primera vez en Ecuador

Estudiantes unidos en busca de basura

Bajo el mantra de ciencia participativa, Juan Fernando Lagos, profesor de Ciencia en la Unidad Educativa Tomás de Berlanga, se apuntó por segundo año consecutivo a ser parte del muestreo de Científicos de la Basura.

Publicidad

“La idea de esta ciencia ciudadana es una iniciativa superchévere”, menciona Lagos. “Participan también los estudiantes, porque son quienes realizan los muestreos y la divulgación de resultados”.

El profesor lideró un equipo de adolescentes que este año hicieron el muestreo en Tortuga Bay, a 40 minutos a pie de Puerto Ayora. No faltaron voluntarios para este proyecto, y Lagos lo atribuye al entusiasmo de los jóvenes por la conciencia ambiental que prima en las islas Galápagos.

Publicidad

‘Guardianes galapaguitos’, una aventura para inculcar el respeto ambiental

“Si comparas un estudiante de colegio de Galápagos con un estudiante de continente... En Galápagos tienen más conciencia del reciclaje, de separar la basura, porque es una realidad con la que crecen los chicos de la isla”, destacó. “Aquí existe una conciencia sobre el manejo de los desechos, aunque todavía falta mucho por hacer”.

Muestreo de macrobasura en Tortuga Bay. Foto: Cortesía de Dayanna García.

Dayanna García fue una de las primeras estudiantes en querer participar en esta edición del proyecto de Científicos de la Basura. En una entrevista con EL UNIVERSO, la joven de 16 años aseguró que lo que la motivó a apuntarse fue en parte recordar la basura que ha habido en las playas en sus visitas anteriores.

La preparación de los participantes del equipo duró alrededor de dos semanas, en las que estudiaron a profundidad las guías de Científicos de la Basura y pusieron en práctica la metodología indicada para garantizar resultados precisos. Según las instrucciones, debían dividir la playa en transectos y construir estaciones en las que se iba a levantar la información.

“En mi grupo, yo era la encargada de contabilizar y registrar la basura”, cuenta García. “No encontramos casi nada de basura y eso es muy bueno, porque somos una isla y no encontrar basura es un cambio positivo para la isla”.

Publicidad

Muestras de macrobasura en la playa de Tortuga Bay. Foto: cortesía de Dayanna García.

Como menciona la estudiante, los resultados fueron alentadores para Galápagos. En Tortuga Bay, cuya playa mide 2 kilómetros de largo, solo se encontraron tres elementos de macrobasura, es decir, basura con un tamaño superior a 2,5 cm. Mientras que, en un muestreo previo realizado en 2021, el promedio nacional de Ecuador fue de un elemento de macrobasura por metro cuadrado.

1.200 millones de empaques plásticos, suficientes para llenar seis estadios, fueron recuperados en Ecuador

Según García, una de las posibilidades alrededor de la limpieza de las playas en Galápagos es que la comunidad de guardaparques y voluntarios por el medioambiente constantemente recogen la basura.

“Al ser un parque nacional hay muchas regulaciones. También hay por parte de un segmento grande de la población mucha conciencia con relación a la basura y al manejo de los desechos”, añade Lagos.

Hay menos macrobasura, pero más microplásticos

Mientras se destaca la ausencia de macrobasura en Tortuga Bay, hay otros factores que conciernen a los ambientalistas.

María Luisa Buitrón, coordinadora de los programas locales en la Fundación de Educación para Comunidades Sostenibles (ECOS), señala que esta playa específica no tiene muchos desechos porque no se vende comida en sus alrededores y tiene más regulaciones.

Eso no quiere decir que en Galápagos no haya basura”, indica Buitrón. “Es un poco diferente cuando hacemos muestreo de microplásticos en Tortuga (Bay), donde nos damos cuenta de que hay bastante plástico en las playas, pero que ya está en microplástico y que no es tan visible”.

De acuerdo con Buitrón, se han encontrado desde pélets hasta fragmentos más grandes de plásticos que se están desintegrando.

Tres científicos ecuatorianos vigilan el cambio climático desde una estación meteorológica en un glaciar

“Con el microplástico se sabe muy poco todavía, pero se está investigando un montón. Sabemos que el microplástico está hasta en nuestro cuerpo”, se preocupa.

“A simple vista podemos decir que estamos superbién, pero cuando hacemos limpiezas en las costas vemos la basura que nos llega de otros lados y también la basura que de alguna manera nosotros también generamos como comunidad”, señala.

Muestra de basura en Tortuga Bay. Foto: Cortesía Dayanna García

De la basura a la acción

El director de Científicos de la Basura comenta que este es el primer año en el que se está implementando un nuevo paso en el proyecto de muestreo de basura en playas del Pacífico. Se trata de construir planes de acción basados en los resultados encontrados, ya sea enfocándose en acciones de prevención o de mitigación.

De acuerdo con Nelson Vásquez, estas estrategias son una manera de fomentar la ciencia participativa al integrar la creatividad, por eso es importante que la idea nazca de los mismos estudiantes que participaron en los muestreos.

“Solo las personas de cada localidad pueden entender cuál es la mejor solución de acuerdo a la realidad local”, explica Vásquez. “Cada grupo puede plantear la acción que más le guste y que, a partir del dato científico, sea práctico”.

El pasado viernes 19 de julio, los estudiantes y voluntarios de Santa Cruz se organizaron para poner en práctica su plan de acción en la plazoleta de Pelican Bay. En una feria abierta al público, los participantes expusieron los datos encontrados en los muestreos y las conclusiones extraídas de la investigación.

Dayanna García, quien también fue parte de esta exposición, comenta que, además de las charlas a los galapaguenses, también se entregaron diplomas para felicitar a los ciudadanos por su compromiso con la isla al tomar el rol de guardaparques.

Transformar la basura en energía: así es como Suecia maneja los desechos y cómo se podría replicar esta tecnología en Ecuador

Exposición en Pelican Bay. Foto: Nelson Vásquez.

María Luisa Buitrón señala que, como representante de Fundación ECOS, su objetivo es que los jóvenes “se empoderen y sean ecolíderes, que creen el mundo en el que ellos quieran vivir”.

¿Cómo podemos cambiar nuestros hábitos y comprometernos a ser parte del cambio y no del problema?”, eso es lo que intenta transmitir la educadora ambiental.

Y Vásquez, quien ya lleva más de quince años estudiando la basura en las playas con Científicos de la Basura, recalca la importancia de los planes de acción: “Nos podríamos pasar la vida entera estudiando la basura, pero hay que buscar soluciones”. (I)