En el hospital Verdi Cevallos de Portoviejo atendieron a una paciente que tenía una bola de pelos en el estómago.
La mujer tenía un bezoar (bola de material extraño que se ingiere, compuesta de pelo o fibra) que fue retirado en una intervención quirúrgica.
Se trataba de una masa de al menos 40 centímetros con un peso de dos libras y un volumen total de 896 mililitros.
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La mujer, de 24 años, la tuvo durante los últimos dos años en el estómago. Esta le generaba intenso dolor, vómitos y dificultad para ingerir alimentos sólidos y líquidos.
“Era una masa que ocupaba toda la cavidad gástrica, pudiendo incluso identificarse al tacto desde el exterior”, indicó Pedro Lovato, especialista en cirugía general y quien lideró el procedimiento.
“Es una paciente con una alteración psicoemocional, por lo que el diagnóstico definitivo se consiguió a través de una videoendoscopia realizada por el servicio de Gastroenterología”, añadió el cirujano.
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Después de que se recupere de la cirugía, ella será atendida por un psiquiatra para que trate el problema que la lleva a comer cabello.
Por la obstrucción, que alcanzaba también una primera parte del intestino, la paciente había perdido peso de manera significativa, a tal punto de no poder ingerir alimentos.
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Además de salvarle la vida, la cirugía también evitó otras lesiones graves de estómago, resaltaron los médicos. (I)
